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Limpiar regularmente nuestras botellas de agua reutilizables es esencial para prevenir la acumulación de bacterias y hongos que pueden ser perjudiciales para la salud, según advierten expertos. Un estudio reveló que una botella reutilizable puede transportar hasta 20,8 millones de UFC, superando la cantidad de bacterias encontradas en objetos aparentemente más sucios, como inodoros o fregaderos. La presencia de manchas verdes o negras en la tapa puede indicar un nivel extremadamente alto de contaminación. Los síntomas de una botella sucia van desde náuseas y vómitos hasta infecciones graves difíciles de tratar. Para mantener la higiene, se recomienda lavar la botella con agua y jabón, utilizar cepillos para eliminar microorganismos, dejar secar antes de rellenar y no compartirla ni usarla con otros líquidos que puedan favorecer el crecimiento de bacterias.
Limpiar nuestras botellas de agua reutilizables regularmente es fundamental para prevenir cualquier tipo daño a nuestro organismo.
Llevar una botella reutilizable a cualquier parte nos trae muchos beneficios. Desde la oportunidad de mantenernos hidratados todo el tiempo, de evitar beber otros productos dañinos para el organismo y hasta ayudar al medio ambiente evitando desechar envases de jugos o agua.
Pero el utilizar una botella también requiere un cuidado especial, pues por el contrario nos enfrentamos a convivir con bacterias.
“Muchas personas creen que, como allí sólo hay agua, basta con enjuagarla bajo el grifo antes de llenarla y la botella quedará limpia”, dijo el médico Rodrigo Lins, consultor de la Sociedad Brasileña de Enfermedades Infecciosas a BBC.
Sin embargo, lo anterior está lejos de ser una realidad pues si no están correctamente lavados estos contenedores pueden acumular bacterias y hongos que pueden ser perjudiciales para la salud.
Comparación con otros artículos
De acuerdo al medio citado, un estudio realizado por WaterFilterGuru, una empresa especializada en el control de la calidad del agua en Estados Unidos calculó que una sola botella reutilizable puede transportar alrededor de 20,8 millones de UFC (Unidades de Formación de Colonias).
UFC es una medida que indica la cantidad de microbios viables, capaces de formar una colonia, en una superficie determinada.
Aquel estudio se comparó con otros donde se indaga las UFC en objetos que parecieran ser más sucios que una simple botella y sus conclusiones son impactantes.
En la superficie de un inodoro encontraron un promedio de 515 UFC, es decir, la botella tenía 40.000 veces más bacterias que la taza del inodoro.
Otra de ellas fue el contenedor de comida para mascotas quien tenía 1,4 millones de UFC en promedio, el mouse de computadora4 millones de UFC y el fregadero de la cocina 11 millones de UFC.
Un estudio publicado por expertos de la Universidad de Henan en China concluyó que existe un “nivel extremadamente alto de contenido bacteriano y un rápido crecimiento microbiano” en las botellas de agua.
Cómo detectar la presencia de bacterias en las botellas
Los autores estiman una media de 75.000 bacterias en cada mililitro de agua, los cuales pueden multiplicarse y alcanzar hasta 2 millones/ml en sólo 24 horas.
Sumado a ello, el ambiente húmedo, cálido y oscuro, en el caso de botellas de plástico o aluminio, también representa un escenario ideal para muchas especies de hongos.
Un ejemplo de un nivel de descuido extremo es la aparición de manchas verdes o negras en la superficie de la tapa, en zonas de difícil acceso, como las boquillas o donde existen artefactos de plástico en el interior del envase.
¿Aquello puede ser un riesgo para la salud? De acuerdo a los expertos los síntomas pueden variar dependiendo de la persona.
Por un lado detallan que si el número de microbios en la botella es muy alto, la persona puede experimentar síntomas leves, como náuseas y vómitos.
En caso de que el frasco sea contaminado por bacterias más graves, aquello puede provocar infecciones que podrían ser difícil de tratar con antibióticos comunes.
Y por último, existen personas que son alérgicas a hongos y el moho, por lo que aquellos pueden provocar congestión nasal, náuseas, dolor de cabeza, fatiga, entre otras molestias a quien sea dueño del envase.
¿Cada cuánto tiempo y cómo limpiar la botella?
Una vez teniendo claro los riesgos, lo primero que se debe tener en cuenta es que la botella se debe limpiar el mismo día que se utiliza. “Lo ideal es lavarlo cada vez que lo utilices“, explica Lins.
Por ello, para controlar el crecimiento bacteriano, se debe utilizar agua y jabón, o los mismos productos que se utilizan para lavar los platos.
“También es importante utilizar cepillos para eliminar mecánicamente los microorganismos”, añade el microbiólogo Jorge Timenetsky, del Instituto de Ciencias Biomédicas de la Universidad de São Paulo.
Luego se debe dejar secar un rato antes de llenarla con agua para un nuevo ciclo de hidratación.
Por último, los investigadores también sugieren no compartir el objeto con otras personas y no llenar el recipiente con otros líquidos, como jugos, bebidas deportivas y refrescos, ya que contienen nutrientes que pueden “estimular” las colonias de microbios.