Para algunas personas, la concentración es una de las tareas más difíciles del día, sobre todo cuando una y mil distracciones a tu alrededor que complican el trabajo de poner atención a una sola cosa.
Un estudio de la Universidad de California, señala que la concentración dura unos 23 minutos. Esto puede variar según la edad de la persona y la etapa en la que se encuentra.
Pero no todo está perdido, ya que para volver a concentrarse existen diversas técnicas, y una de ellas es mucho más sencillo de lo que parece.
Esta es, la respiración, pero no de manera inconsciente como lo hacemos durante el día, ya que, automáticamente, respiramos entre 12 y 16 veces por minuto.
Según un estudio de la Universidad de Stanford, respirar incide en la relajación, equilibrio emocional y mejora la concentración.
Si lo hacemos mal, la falta de oxígeno incide en el estrés, ansiedad y pérdida de energía, señala Rubén Sosa, instructor avanzado de respiración, al portal de salud, We Life.
Respiración y concentración
A sus palabras se suma la psiquiatra Marian Rojas Estapé, quien dijo al medio que “la respiración es la mejor manera que tenemos de salir de modo alerta”.
Respirar ayuda a liberar el estrés y centrarse en las tareas que hay que cumplir, lo que se puede hacer con una sencilla técnica llamada “la caja” o “cuadrada”, la que toma solo cinco minutos.
Esta técnica alivia los puntos altos de estrés y ayuda a recuperar la concentración.
Según Business Insider, esta técnica es originaria de la India y la utilizan los Navy Seals para liberar el estrés. Su nombre se debe a que está compuesta por cuatro partes iguales.
Tal Rabinowitz, CEO de The DEN Meditation, empresa que da clases de meditación, dijo a Insider que “Tiene raíces increíblemente antiguas, con diferentes técnicas para calmar, aportar energía, refinar la concentración y relajar el sistema nervioso; sin embargo, los militares lo popularizaron y lo generalizaron”.
¿Cómo hacer la respiración de caja?
Los pasos para realizar este tipo de respiración es el siguiente:
– Siéntate con la espalda recta en una silla o en el suelo, con los pies bien apoyados en el piso, y visualiza un cuadrado imaginario frente a ti.
– Inhala lentamente (opcional si quieres tener los ojos cerrados), contando hasta cuatro. Mientras lo haces, visualiza la parte superior de la caja.
– Mantén la respiración contando hasta cuatro, mientras visualizas el lado derecho de la caja.
– Suelta el aire contando hasta cuatro, visualizando la parte inferior de la caja.
– Aguanta la respiración por cuatro segundos, mientras ves el lado izquierdo de la caja.
– Repite el proceso por cinco minutos visualizando la caja.
Para un mejor control del tiempo, se recomienda por una alarma que suene a los cinco minutos.