“¿Qué? ¿Tienes internet?”, preguntó el presentador a la influencer Alice Pataxó, de 19 años, para el canal infantil de YouTube “Canal IN”. Pataxó habla desde su casa en su aldea en la reserva natural de Monte Pascoal, en el sur del estado de Bahía, a unos 40 kilómetros del supermercado más cercano. “No tenemos teléfono, pero el Internet por satélite es estable”, explica.
Parte de su trabajo como activista indígena es declarar que no es una contradicción que su pueblo viva de lo que ha cultivado y use Internet. Que sus lecciones escolares se llevaron a cabo, en parte, en el bosque y que ahora está estudiando en la Universidad Federal de Bahía Sur.
Pero Alice Pataxó no siempre habla con tanta calma y amabilidad como en el programa infantil. En sus propios canales de redes sociales, parece más combativa y también más molesta por los clichés que le chocan una y otra vez: su piel es demasiado clara para una mujer indígena; su tocado tradicional y su pintura facial son solo una máscara.
En uno de sus tuits más recientes, preguntó: “¿Quiénes son los pueblos indígenas brasileños?” Ella misma respondió: Ser indígena tiene que ver con la tradición, pero no con el atraso. La identidad resulta del sentimiento de pertenencia y de la eterna lucha contra la colonización. Hasta el día de hoy, dice, la sociedad brasileña quiere quitarle todo lo que define a los pueblos indígenas – desde el territorio hasta la identidad: “Si no vivimos completamente aislados, supuestamente no somos indígenas. Esa es una forma colonial de pensar contra la que luchamos todos los días”, alega.
Acostumbrada a luchar
Con 15 años, ella y su familia acamparon por un tiempo al borde de una carretera, porque su aldea había sido despejada por la policía. La zona fue objeto de especulaciones inmobiliarias. Pero la lucha por la supervivencia la hizo fuerte: “Si hoy tengo la sensación de que no puedo hacer algo, me recuerdo a mí misma que ya he sobrevivido a cosas peores”, dice. “Lo que hago, lo hago para que otros niños indígenas no tengan que experimentarlo”, aclara.
Tiene alrededor de 150.000 seguidores en total entre Twitter e Instagram, incluidas algunas celebridades brasileñas como la cantante Emicida, el humorista Marcelo Adnet y la política Marina da Silva.
Los rituales ayudan a soportar los prejuicios
Cristian Wariu Tseremey’wa tiene un gran número de seguidores en Instagram. Su canal de YouTube tiene 33.000 suscriptores. Cristian Wariu es del pueblo Xavante, en el centro de Brasil. También tiene antepasados guaraníes que viven más al sur.
Como único indígena en la escuela, se enfrentó a muchos prejuicios, incluso por parte de los maestros. En ese momento, nunca se hubiera atrevido a coquetear con rasgos típicos de los indígenas, como el cabello negro, grueso y liso, como lo hace hoy en un video de Instagram, aunque los mismos clichés ahora lo persigan en las redes sociales.
Orgullosos de los orígenes indígenas
“Si hay espacio para debatir, entro, pero tampoco tengo ningún problema en desconectarme cuando no tiene sentido”, dice el joven de 22 años. “Los rituales de los Xavantes implican muchas pruebas, tanto físicas como psicológicas”, explica. “Tarde o temprano la vida te juega una mala pasada y tienes que aprender a soportarlo”, afirma.
Él se ha propuesto la tarea de difundir el conocimiento sobre los Xavante y otros pueblos indígenas para acabar con los clichés: “Mis padres me enseñaron a estar orgulloso de mis orígenes”, dice el hijo de uno de los líderes tribales. “Podemos fortalecer nuestra identidad y nuestra confianza en nosotros mismos a través de Internet”, asegura. Cristian Wariu estudió Comunicación y Organización en Brasilia. Los conocimientos de computadora, edición, etc, los aprendió solo.
Aunque sus objetivos son similares, los enfoques de ambos “influencers” difierEn. Alice Pataxó se presenta como una joven activista, sus publicaciones en Twitter tienen una gran carga política, sus comentarios son agudos, la estética de la imagen parece ajustada a su feminidad.
Cristian Wariu, en cambio, aparece frente a la cámara con una camiseta. Explica el mundo de los indígenas con mucha calma y amabilidad. Ambos cuentan con el apoyo de su gente.