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JonBenét Ramsey, la niña de seis años asesinada en su casa en Colorado en 1996, sigue siendo parte de uno de los misterios policiales sin resolver en Estados Unidos. Su familia conformaba una típica familia tradicional norteamericana, pero el asesinato de JonBenét generó conmoción al descubrirse que había sido abusada, sufrido una fractura en el cráneo y estrangulada. A pesar de las diversas hipótesis y sospechosos, incluidos su propia familia, como su madre, padre o hermano, el caso nunca ha sido resuelto. En la actualidad, con la familia principal fuera de sospecha, la policía cerró el caso en 2008 sin haber encontrado al culpable definitivo.

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JonBenét Ramsey es protagonista de uno de los casos policiales que no han sido resueltos en Estados Unidos. Su historia es particular, y sigue generando conmoción.

Se trata de una niña de seis años que, la Navidad de 1996, fue asesinada en el sótano de su casa en el estado de Colorado. Hasta el día de hoy no se ha dado con el destino de los perpetradores.

De acuerdo a CNN, sus padres eran John y Patsy Ramsey, quienes configuraban una acomodada familia tradicional norteamericana. El primero de ellos era gerente de una compañía de seguros, mientras que la madre era una dueña de casa modelo, además de ostentar varios títulos de belleza en su juventud.

Ambos tenían un hijo menor llamado Burke.

La pequeña JonBenét fue bastante influenciada por su madre en cuanto a la vanidad, ya que a su corta edad había estado en campañas publicitarias y concursos infantiles.

De hecho, ostentaba los títulos de Little Miss Colorado, America’s Royale Miss y National Tiny Miss Beauty.

Padres de JonBenét Ramsey
Wikimedia Commons

El asesinato de JonBenét Ramsey

Según CNN, aquel 24 de diciembre de 1996 la familia tuvo su cena navideña desde temprano. Posteriormente se fueron a dormir, debido a que debían viajar a Michigan al día siguiente.

Patsy despertó esa jornada las 05:30 horas, y procedió a ir a despertar a sus hijos para iniciar con el viaje. Sin embargo, notó que la pequeña no estaba en su cama.

Fue hasta el primer piso y encontró algo aterrador: una nota que indicaba que la niña había sido secuestrada, por lo que se pedía un rescate por 180.000 dólares.

La familia llamó a la policía, quienes les pidieron que buscaran rastros por toda la casa. Fue así como, luego de unos minutos, hallaron el cuerpo inerte en el sótano.

De esta forma inició el caso policial en sí, teniendo a la familia dentro de los principales sospechosos. La autopsia develó que JonBenét había sido abusada, tenía una fractura en el cráneo y signos de haber sido estrangulada.

Durante los primeros meses la familia tuvo una postura muy reservada, evitando dar declaraciones en los medios de comunicación.

Se levantaron todo tipo de hipótesis. Una indicaba que la menor había sido asesinada por su madre, debido a los celos, otra detallaba que su hermano la había golpeado hasta la muerte en un ataque de ira. También se llegó a decir que su padre la abusaba constantemente.

Desde ese entonces existieron varias líneas investigativas, pero sin muchos fundamentos. Las únicas pistas eran material genético en el cuerpo de la niña, y un vidrio roto.

Fue en 1999 cuando un jurado en Colorado dio el visto bueno para imputar a la familia por el crimen. Sin embargo, el fiscal Alex Hunter desestimó aquello al no tener pruebas concluyentes.

Desde esa fecha, hasta 2006, hubo varios sospechosos, pero nunca se pudo comprobar si algunos tuvo relación con el crimen.

Entre ellos estuvo un hombre llamado Bill McReynolds, amigo cercano de los Ramsey. Otro fue Gary Oliva, hombre de 50 años que tenía cargos por pedofilia.

Un fotógrafo llamado Randy Simons también fue investigado, debido a que había estado en prisión por 15 cargos de pornografía infantil y, en antaño, había hecho una sesión de fotos de la niña. Sin embargo, tampoco existió evidencia clarificatoria.

Recién en 2006, un perfilador criminal indicó que la letra que estaba en la falsa carta de secuestro, esa mañana de Navidad, tenía similitudes con la de la madre. No obstante, ella había muerto hace años de cáncer de ovarios.

En la actualidad, John Ramsey tiene 79 años y vive alejado de la vida pública. Su casó en segundas nupcias.

Por su lado, el hermano Burke, de 31 años, se convirtió en hombre de negocios, asegurando que no tiene mayores recuerdos de aquella noche.

La policía cerró el caso policial en 2008, sin haber encontrado al culpable.