Generalmente, las costumbres y tradiciones relacionadas con la Edad Media suelen abrumarnos, debido a que algunas están relacionadas con ritos que serían inimaginables con los tiempos actuales.
Sabido es que, en ese entonces, la brujería era considerada como una práctica de alto riesgo e inaceptable, por lo que las personas que eran acusadas de esto, en su mayoría mujeres, eran severamente castigadas o incluso condenadas a muerte.
Uno de los castigos comunes entre tipo de mujeres fue conocido como Scold’s Bridle (“La máscara de hierro” en español), el cual consistía en una herramienta de tortura diseñada para aquellas que eran acusadas de “andar esparciendo chismes”, “decir mentiras”, “refunfuñar” o llevar a cabo “conversaciones con el diablo”.
La utilización de este elemento tenía como fin evitar que las mujeres emitieran palabra alguna, con el propósito de pagar por sus supuestos pecados expuestos con anterioridad.
Según detalla la BBC, su utilización era promovida por la iglesia de este tiempo, bajo la creencia de que el castigo físico era la única forma en que las personas podían limpiar sus almas.
Los países donde se utilizó, entre los siglos XVI y XVII, fueron Alemania, Inglaterra, Escocia y Gales, no sólo cómo un método severo de dominación y reprimenda hacia las ciudadanas, sino que también como una forma de humillarlas.
Su composición
En ese entonces, la Scold’s Bridle se componía de varias tiras delgadas de hierro, al que se le unía un largo trozo de metal que se introducía al interior de la boca de las personas que la utilizaban.
La idea de este trozo de metal era presionar la lengua de la mujer y evitar que pronunciara cualquier tipo de palabra en el tiempo que la llevara puesta, que podían ser días o semanas.
No obstante, algunos expertos indicaron que en esos años se hicieron herramientas que tenían púas de hierro en el interior, la cuales tenían el objetivo de causar daño en aquella zona.
Se dice que, a causa de esto, muchas mujeres terminaron con sus lenguas mutiladas, lo que incluso se naturalizó en ese época.
De acuerdo a The Guardian, un juez local era el encargado de determinar el tiempo exacto que la víctima debía ocupar esta herramienta, la cual no podía ser quitada en ningún momento.
Precisamente este reglamento provocó que muchas personas sufrieran problemas de desnutrición o incluso murieran, debido a que no podían comer al estar usando el aparato.
Con el paso de los años el castigo se amplió hacia los hombres; básicamente aquellos que eran acusados por el delito de injurias o de calumnias, quienes debían portar la Scold’s Bridle mientras estaban en la cárcel.
Los registros indican que los esclavos de ese tiempo también fueron sometidos a esta tortura, la cual podía durar meses en el caso de ellos.
Humillación
Sin embargo, el castigo no terminaba con la utilización de este artefacto, ya que la mujer también debía dar el denominado “paseo de la vergüenza”, en compañía de su marido.
En este sentido, los historiadores indican que el hombre le ponía una correa a su esposa, que llevaba puesta la Scold’s Bridle, y salían a recorrer los pueblos con el objetivo que ella recibiera insultos y fuera humillada.
Sin ir más lejos, se dice además que el esposo animaba a los transeúntes para que insultaran a la víctima e incluso la escupieran.
En ocasiones también se les ponía una especie de cascabel en la parte de arriba de la cabeza, para que llamaran más la atención y se acercara más gente hasta donde ellas estaban.
Las jornadas más dramáticas terminaban con personas abalanzándose sobre las víctimas, a quienes golpeaban y sacudían de la cabeza, causándoles daños en los dientes, roturas de mandíbulas, sangrado e incluso vómitos.
Historiadores concuerdan en que todos estos vejámenes eran apoyados por la iglesia en ese entonces, en el entendido que los castigos corporales era la única forma de expiar los pecados y comprender cuál era el peso de los crímenes contra aquella institución.
Asimismo, también se creía que sólo a través del dolor máximo la persona podía alcanzar el verdadero entendimiento de atentar contra lo sagrado, y por consiguiente alcanzar la sabiduría.
Hay que señalar que varias ciudades de Inglaterra tienen algunas Scold Bridle en museos, donde las exhiben como instrumentos de tortura y barbaries utilizados en épocas pasadas