Desde que comenzó el proceso masivo de vacunación para combatir el coronavirus, se sabe que existe el riesgo de sufrir algún efecto secundario, los que van desde el dolor y enrojecimiento en la zona de la inoculación, a sensación de fiebre, tercianas, entre otros.
Sin embargo, tras varios estudios, el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), concluyó que dichos efectos en el caso de la dosis de refuerzo serían los mismos que ocasionó la segunda inoculación del esquema de vacunas.
“Los informes voluntarios de v-safe no encontraron patrones inesperados de reacciones adversas después de una dosis adicional de la vacuna COVID-19. Los CDC continuarán monitoreando la seguridad de la vacuna, incluso para dosis adicionales de COVID-19”, señala un extracto del informe.
De acuerdo a los datos entregados, el 79% de los inoculados con la dosis de refuerzo informó tener reacciones tras la inyección, como dolor o hinchazón, en comparación con el 77% por ciento después de una segunda dosis.
“Un número ligeramente menor de personas experimentó reacciones sistémicas, como fiebre o dolor de cabeza: el 74,1 por ciento de las personas informó esos efectos secundarios después de la dosis tres, en comparación con el 76,5 por ciento después de la dosis dos”, agrega el documento.
“La mayoría de las reacciones locales y sistémicas informadas fueron de leves a moderadas, transitorias y se informaron con mayor frecuencia el día después de la vacunación”, dijeron los expertos según recoge The New York Times.
Anteriormente, un grupo de científicos había realizado un pequeño ensayo con personas que recibieron esta tercera dosis de Pfizer, encontrando que algunas reacciones también coincidían con las de la segunda inoculación.