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El cáncer de mama triple negativo es un subtipo de cáncer de seno agresivo, que aparece, en la mayoría de los casos, en mujeres jóvenes, y que afecta a unas 620 chilenas cada año. María Paz, Macarena y Nadia compartieron sus experiencias a BioBioChie, destacando la importancia de la detección temprana, el acceso a tratamientos adecuados y la red de apoyo para sobrellevarlo. La Fundación "Mujeres Por un Lazo" busca concienciar sobre este tipo de cáncer y abogar por tratamientos innovadores, como la inmunoterapia. En abril de 2024, Diputados presentaron una resolución para incluir la inmunoterapia en el tratamiento del cáncer de mama triple negativo en el sistema público. Sin embargo, a pesar de los pequeños avances, aún se requiere mayor atención y recursos para enfrentar esta enfermedad de manera efectiva.
“Hubo un momento de locura, de tristeza, de evasión, de no querer saber de nadie, de que mi esposo tuviera que sacar al hijo de la casa, dos días para llorar a mares”. Este es parte del testimonio de María Paz, una de muchas mujeres con cáncer de mama triple negativo.
En 2023 fallecieron 2.263 mujeres por cáncer de mama. Aquella cifra es el mayor número de muertes por la enfermedad, que aumentó en un 12,87%, en comparación con 2022 a nivel nacional, según el Ministerio de la Mujer y Equidad de Género.
De acuerdo con las proyecciones del Observatorio Global del Cáncer (GLOBOCAN), cada año se diagnostican 5.640 nuevos casos de cáncer de mama en Chile, lo que posiciona a esta enfermedad como la primera en incidencia y mortalidad entre las chilenas.
Un estudio publicado en la revista BMJ Oncology, calcula que la incidencia mundial de tumores entre menores de 50 años, ha aumentado un 79% en tres décadas.
BioBioChile conversó con tres mujeres menores de 40 años que relatan su historia tras padecer cáncer de mama triple negativo, un subtipo de cáncer agresivo que cada vez está más presente en mujeres jóvenes.
María Paz Acuña: “No se posterguen… piensen absolutamente en ustedes”
María Paz Acuña tiene 39 años, vive en Chillán, es madre y de profesión es trabajadora social.
Su pasatiempo y segunda vocación es el violín, por tal razón se transformó en monitora de formación de orquesta infantojuvenil.
En enero de este año decidió ir al doctor, todo a raíz de una sospecha de algo anormal en su mama izquierda, lo cual había notado hace un tiempo, pero optó por no ponerle mayor atención.
“Yo efectivamente fui una de esas pacientes que dijo no, ‘esto no puede ser’, entonces tuve un diagnóstico bastante tardío… no lo podía creer después”, dijo.
“El 3 de enero, me hice la eco mamaria y en el momento la persona que me hizo la eco, me dijo, ‘¡uy, qué terrible!’, necesito que se haga rápidamente una mamografía. Con su cara y su sorpresa me dio a entender que obviamente no estaba viendo nada favorable”, cuenta.
Luego de dos meses de derivaciones con especialistas y tras una serie de exámenes para comprobar sospechas, el 4 de marzo se le informó su diagnóstico: padecía cáncer de mama triple negativo.
María Paz tenía un tumor de 10 centímetros, el cual había crecido con el paso del tiempo en su mama izquierda.
“No lo podía entender… cómo va a ser para mí que soy joven, con toda la energía del mundo… porque me está diciendo esto esta persona”, recuerda.
Tras unos momentos de negación, decidió iniciar todo el protocolo para ser tratada a tiempo por el sistema público, pese a su tardío descubrimiento.
“Me fui atendiendo y me fui dando cuenta que sí, efectivamente era duro el panorama en ese trayecto. Me fui integrando a distintas páginas de Instagram, conectándome con personas, entonces en el trayecto empezaron a fallecer personas del mismo subtipo y me vine abajo”, dijo María Paz.
Solo días después, el 20 de marzo, comenzó con el tratamiento de quimioterapia que duró hasta el 26 de agosto.
Al recordar aquellos angustiantes momentos meses atrás, cuenta: “hubo un momento de locura, de tristeza, de evasión, de no querer saber de nadie, de que mi esposo tuviera que sacar al hijo de la casa, dos días para llorar a mares”.
Con el tiempo, debió volver a realizarse nuevos exámenes para averiguar el estado de su tumor, incluida una resonancia magnética.
“Gracias a Dios, yo no sé realmente qué funcionó, la energía, mi actitud, pero bueno, no estaba y finalmente me informaron que había desaparecido completamente, así que solo quedaba seguir el camino, obviamente porque esta es una buena noticia, pero en el fondo no es el término de todo esto”, menciona.
Así fue como debió someterse a una cirugía, donde los especialistas le indicaron que debían extirpar completamente su mama izquierda.
De acuerdo a su nueva realidad sin un seno, María Paz es categórica en indicar que por el momento la parte estética está en segundo plano.
“He pasado estos días enfocándome mentalmente en sobrellevar el dolor bien y la parte estética en este minuto, me importa un comino porque yo solo quiero poder mover el brazo para poder después tocar violín”, cuenta con seguridad.
Respecto a las mejoras para tratar el cáncer de mama triple negativo, María Paz cuenta que tras informarse, descubrió que en Chile es necesario implementar un tratamiento de inmunoterapia en el sistema público, es decir, un tipo de terapia alternativa.
“Creo que no es para todos… O sea, hay que tener algún tipo de examen, pero se puede utilizar cuando se requiere, el problema que en el sistema público no está”, dijo.
“Esperamos que tengan el presupuesto para este próximo año, esa terapia o esa indicación médica, para que finalmente se salven más personas, porque este cáncer es súper agresivo, avanza rápido en gente joven, madres de niños pequeños”, menciona María Paz.
A esto último complementa que también se debería invertir en estudios sobre el tipo de cáncer, para que las personas puedan informarse, al igual que los especialistas.
Por último, envía un valioso mensaje: “No se posterguen… No se posterguen en exámenes, aquí piensen absolutamente en ustedes”.
Macarena Miño: “Espero que esta sea una historia más que contarle a mi hijo, que tuve cáncer en algún momento”
Macarena Miño Sandoval tiene 27 años, es madre, vive en La Serena y de profesión es ingeniera civil industrial, por lo que trabaja en proyectos mineros.
Fue gracias a su trabajo, que en mayo de este año descubrió un pequeño bulto en una de sus mamas, pues constantemente debe realizarse examen por el rubro.
Específicamente, en un examen de rayos X de pulmón, apareció una mancha en su mama izquierda. Macarena asegura que nunca se realizó una eco mamaria, pero sí, mamografías.
“Yo por este hallazgo, le mostré al ginecólogo la eco mamaria, lo necesario para mujeres entre 25 hasta los 40 años, y efectivamente tenía un bultito de 2 centímetros”, dijo.
Macarena se impresionó tras su hallazgo, pues solo habían pasado 8 meses entre los antiguos exámenes, los cuales no revelaban ningún problema en alguna de sus mamas.
“No había sentido nunca nada, si no fuera por ese examen… Algo que tiene este cáncer, es que avanza rápido”, menciona.
Luego de la sospecha, debió realizarse muchos estudios, cubiertos por Isapre. Previo a los resultados de la biopsia, los doctores le aseguraron que sus sospechas eran poco probables y que debía tener calma, pues sus mamas se veían normales.
“Creo que es peor tener una noción de tranquilidad al principio y que de repente te entreguen este resultado, porque quizás si yo hubiera tenido una alta probabilidad de que esto fuese positivo, quizá al momento de recibir el resultado hubiera sido diferente”, cuenta.
Tras confirmarse el cáncer y específicamente el subtipo de triple negativo, Macarena menciona que el proceso de derivación fue rápido, y que de su trabajo se mantuvieron flexibles con los horarios.
Por ello, actualmente está en sesiones de quimioterapia. “Llevo dos ciclos, es decir, 6 quimioterapias y ya está aprobado mi tercer ciclo, todos mis exámenes de sangre han salido bien”, menciona.
Sumado a lo anterior, cuenta que junto con la quimioterapia existe un medicamento que podría o debería utilizar, sin embargo, es una opción millonaria que solo se obtiene de manera particular.
El medicamento se llama Pembrolizumab, y de acuerdo a un presupuesto que le realizaron personalmente desde un laboratorio, solo una dosis cuesta más de 6 millones de pesos.
“Yo necesito 8 dosis antes de mi operación… en estas quimioterapias. Llevo dos ciclos, y ya debiese llevar dos dosis, pero no tengo los medios”, asegura.
“Empieza a imaginar un poco la cantidad de plata, es como comprarse una casa, un departamento, pero tienes que pagarlo ahora, no en 30 años o en 25. Ni la rifa ni nada te ayuda”, comenta Macarena, con un poco de frustración.
A esto último complementa que el no tener otras opciones de tratamiento significa un riesgo para ella y para todas quienes padecen este subtipo de cáncer.
“Quizás tú termines tu quimioterapia, te hagan de nuevo tus exámenes y te encuentren cáncer ramificado en otras áreas de tu cuerpo, porque este cáncer es así, o sea, es agresivo, es de lo más raros en comportamiento, y aunque tú estés llevando una quimioterapia, nada nos asegura que no esté avanzando (cáncer)”.
Previo a su detección de cáncer, el pasatiempo de Macarena era hacer deporte, montañismo y surf. En un inicio se mantuvo optimista de que esta enfermedad se trataría de forma rápida para no abandonarlo, pero la realidad era otra.
Su médico le indicó que no podía realizar ninguna de sus pasatiempos por ser peligroso. Decayó un poco, pero aún tiene las esperanzas de que va a encontrar la forma de superarlo.
“Mi idea o lo que trato de pensar es que va a salir todo bien, que vamos a encontrar la forma de cómo hacer el tratamiento y que ojalá que este cáncer no vuelva a reiniciar”, menciona.
@macaa.s Como el ave fénix, renaceremos ❤️🩹🎗🪷 Post 6 quimios mi pelo ya se había caído casi en un 80% y estaba sin vida… así que decidí raparme con el apoyo de mis amigas y mi pololo ❤️🩹 ojala todos los que pasen por este momento tengan una red de apoyo como la mia 🫂💖 #cancerdemama #triplenegativo #chile #breastcancer #breastcancerawareness💕 ♬ suara asli – Bebeto Zivany – Bebeto Zivany's
A lo anterior complementa: “Espero que esta sea una historia más que contarle a mi hijo, que tuve cáncer en algún momento“.
Optimista cuenta que hace poco se presentó un proyecto por parte de la Cámara de Diputados y Diputadas, para que la inmunoterapia sea garantizada en Chile, y que así pueda regir en el sistema público y privado, como una forma de complementar la terapia tradicional y vencer el cáncer a tiempo.
“Existen casos de personas jóvenes que están teniendo este tipo de cáncer tan agresivo y deberían tomarse cartas en el asunto para tratar de ayudar y que sea mucho más rápido el tratamiento también”, menciona Macarena.
“Una cosa es encontrar el cáncer a tiempo y otra cosa es tratarlo a tiempo, que es lo que necesitamos ahora las mujeres jóvenes como yo”, concluye.
Nadia Pinto: “En cierta forma, estoy muy agradecida del cáncer…”
Nadia Pinto Ferrada tiene 30 años, vive en la comuna de Lo Prado en Santiago y de profesión es terapeuta ocupacional.
Desde sus pasatiempos, solía realizar mucha actividad física, en específico, crossfit, el cual debió reemplazar por algo menos agresivo tras ser detectado su cáncer.
Para compensarlo, cuenta que actualmente hace mucho yoga, teje y dedica más tiempo a sus mascotas.
En mayo de 2023, tras palparse una mama, se dio cuenta que tenía un pequeño bulto.
Nadia menciona que fue impulsada por una publicación de una mujer en redes sociales, quien contaba su historia con cáncer de mama.
“En redes sociales vi como una chica reality estaba hablando que tuvo cáncer de mama un día, y al otro día yo en la ducha me palpe y me sentí”, cuenta.
Fue ahí cuando levantó la alerta y se dirigió a un control con su ginecólogo de confianza. Seguidamente, debió hacerse una eco mamaria, donde acrecentó la sospecha de que algo no andaba bien.
Con el paso de los días, específicamente a finales de julio, confirmó que se trataba de un tumor.
“Yo me quería tratar al otro día, ojalá, pero se demoran porque además me tenía que hacer más exámenes”, dijo.
“Tú perdiste el control de todo, o sea, yo no podía hacer nada para apurar un resultado en la biopsia, no podía hacer nada para mejorar el resultado de un examen… tampoco yo podía agarrar el tumor y sacármelo, yo no podía hacer nada para detenerlo y seguía creciendo“, cuenta.
El caso de Nadia fue diferente al de María Paz y Macarena. Ella no era madre y su cáncer se presentó en una edad poco recurrente de la enfermedad, por lo que debía decidir, sin mucho tiempo para pensarlo, sin en un futuro quería ser madre o no.
“Entonces también fue un tema, te vas a someter a ciertos tratamientos que pueden provocarte infertilidad… Lo tienes que pensar en el momento y tienes que tomar las decisiones en el momento”, cuenta.
A ello complementa: “Entonces, si quieres, tienes que costearlo tú y todo esto contrarreloj”.
Luego de pensarlo bien, optó por guardar sus óvulos, proceso que debió hacer de manera particular.
“Entonces todo eso lo hicimos en tiempo récord. Imagínate de hacer todos los exámenes que tenía que hacer para saber en qué etapa estábamos, cómo se definía este cáncer, más guardar los óvulos, más entre medio que sugieren hacerte estudios genéticos para saber también de dónde vino, eso también lo tuvimos que costear nosotros de forma particular porque tampoco está cubierto y todo entre comillas contrarreloj”, menciona.
Terminado el proceso de exámenes, Nadia se sometió a quimioterapia y luego a una cirugía, específicamente una mastectomía doble, es decir, la extirpación de sus senos.
“La tranquilidad que me regalaba el sacarme la otra mama era impagable en todo ese escenario”, menciona Nadia, al referirse a un posible futuro siendo madre.
Tras finalizar aquel proceso, se sometió a radioterapia, y actualmente se encuentra en una etapa de seguimiento, con quimioterapia oral, con el fin de reforzar todo lo realizado anteriormente.
Junto con ello, Nadia está en un proceso de asimilar todo lo que ha vivido, pues desde su diagnóstico, dispuso su cuerpo de todos los procesos médicos, sin caer en cuenta de su estado.
“Imagínate en menos de un año pasar por la quimioterapia, por una cirugía, por radioterapia. Mi cuerpo está agotado, asimilando y definiendo rutinas”, cuenta.
“Ya no puedo hacer las cosas con la misma velocidad que la hacía antes, con la misma intensidad… estoy haciendo cosas y se me olvidan pasos de las cosas, entonces estoy como adaptándome”, menciona Nadia.
Además, explica que ya al final de sus tratamientos, supo que su cáncer se trataba del subtipo de triple negativo, pues su caso, nunca se pudo confirmar desde su diagnóstico, ya que, según sus palabras, era difícil definirlo.
De esta manera, como “mujer joven”, invita a todas las mujeres a realizarse sus controles periódicos, “no hacerse los locos”, y buscar siempre una red de apoyo.
También hace un llamado a empoderarse de la salud, tener un rol activo y a cuestionar siempre las cosas. “Somos dueños de nuestra salud”, asegura Nadia.
Por último y de forma muy sincera, agradece al cáncer por aparecer en su vida. “En cierta forma, estoy muy agradecida del cáncer, estoy viviendo de otra forma, estoy buscando mi bienestar”, añadió.
Cáncer de mama triple negativo
Cada 3 de marzo se conmemora el Día Internacional del Cáncer de Mama Triple Negativo, un tipo de cáncer que amenaza la vida de mujeres cada vez más jóvenes, menores de 40 años.
“Es un subtipo de cáncer que no tiene en sus células tumorales receptores para estrógenos, receptores para progesterona, ni CerbB-2 (una proteína que se presenta en la superficie de las células cancerígenas)”, dijo a BioBioChile, Cristián Cortés, oncólogo coordinador de Cirugía Oncológica de Clínica Bupa.
A ello complementa que la célula tumoral crece por una vía diferente a la hormonal, es decir, “no se tiene conocimiento de la vía en la que está creciendo y, por ende, no existe un tratamiento específico para ellas. Ahí radica la complejidad de este tipo de cáncer”, asegura el experto.
Según la Sociedad Americana de Cáncer, el subtipo de triple negativo, representa alrededor del 10% al 15% de todos los cánceres de mama.
En Chile, representa alrededor de un 11% del total de casos, es decir, se estima que unas 620 mujeres son diagnosticadas con este subtipo, cada año.
De esta manera, es considerado un cáncer agresivo al ser de rápido desarrollo en comparación con otros tipos de cáncer de seno. Por ello, las tasas de supervivencia, generalmente, no son tan altas.
Fundación “Mujeres Por un Lazo”
Dejando de lado cifras poco alentadoras, en 2022, nace la Fundación “Mujeres Por Un Lazo“, tras la experiencia de sus fundadoras, Claudia y Mariely, sobrevivientes de cáncer de mama, y quienes se conocieron durante sus tratamientos en la pandemia.
De ambas nace la idea de crear un espacio seguro de encuentro, apoyo y acompañamiento para muchas otras mujeres que estuvieran pasando por lo mismo. Así, su fin es brindar contención emocional y compartir experiencias. María Paz, Macarena y Nadia son parte de este grupo.
Por ello, como organización activa, ponen relevancia en el cáncer de mama triple negativo y realizan un llamado a las autoridades a tomar conciencia de este subtipo de cáncer, para así contar con tratamientos y exámenes de diagnóstico adecuados, que permitan a las pacientes y sus familias tener mejores y mayores oportunidades de vivir.
La agrupación, pide contar con acceso a asesoría y test genético, cubiertos por el sistema de salud público y/o privado.
Lo anterior, considerando los beneficios que pueden traer tanto para el tratamiento, como para la toma de decisiones informadas, en pos de un mejor resultado y calidad de vida para las mujeres.
Con ello, también piden más investigación y acceso a tratamientos adecuados e innovadores para todas, independiente de su condición social o sistema de salud, como por ejemplo, la inmunoterapia.
Medidas desde el Estado
En abril de 2024, se presentó la Resolución N° 1258, por parte de un grupo de Diputados, donde se solicita al Presidente de la República, en conjunto con el Ministerio de Salud, que incorporen tratamientos específicos para el cáncer de mama triple negativo, dando cobertura en Fonasa al tratamiento de inmunoterapia.
La resolución detalla que, el cáncer de mama se encuentra protegido con cobertura en los fondos de alto costo público, con aproximadamente 45 mil millones de pesos, que son utilizados en terapias innovadoras para el cáncer de mama tipo HER2 y Hormonales.
“El problema de salud GES N°8 cáncer de mama en personas mayores de 15 años, entrega garantía de acceso para todas las histologías confirmadas con cáncer de mama”, explica a BioBioChile, el doctor Sung Hyuk Kim, jefe Agencia Nacional de Prevención y Control del Cáncer del Ministerio de Salud.
A esto último el experto complementa que “el GES cubre distintas intervenciones sanitarias de tratamientos tales como cirugía mamaria sin y con reconstrucción mamaria, inmediata y diferida, quimioterapia, radioterapia y hormonoterapia”.
“El listado de prestaciones específicas del GES es idéntico para beneficiarias de Fonasa e isapres”, concluye el especialista.
Sin embargo, el tratamiento innovador como la inmunoterapia, no tiene cobertura para pacientes que padecen cáncer de mama triple negativo, ya que no está contemplado dentro de las opciones del sistema público.
Mientras tanto, a través del sistema privado se puede acceder por la Cobertura Adicional para Enfermedades Catastróficas, que solo cubren algunas Isapres, detalla la resolución.
Lo anterior fue confirmado a BioBioChile por Andrea Guerrero Ahumada, jefa del Departamento de Coordinación de Garantías y Prestaciones en Salud del Ministerio de Salud.
“Actualmente, la inmunoterapia para cáncer de mama triple negativo está siendo estudiado en el Estudio de Verificación de Costos para el GES. Esto en el marco de los estudios para el decreto GES 2025-2028″, explica.
El pasado 1 de octubre la Sala de la Cámara de Diputados y Diputadas, aprobó la solicitud al Ejecutivo para la cobertura en tratamientos del cáncer de mama triple negativo. No obstante, aún queda mucho camino por delante.