Cuando nos cae una pestaña dentro, entran impurezas, nos afecta el viento o las alergias, la reacción natural es rascarse los ojos con el fin de aliviar la molestia.
Pero al mismo tiempo, es bien sabido que el frotarlos con mucha fuerza puede afectar a la estructura, especialmente a la córnea, una membrana dura y transparente ubicada en la parte anterior del globo ocular.
Por ello es válido preguntarse cuál es la forma adecuada de rascarse los ojos, lo cual contestaron especialistas en oftalmología.
“Lo más adecuado es no frotar”
La especialista de Clínica Ciudad del Mar, Cecilia Von Bischhoffshausen, es rápida en aclarar que “lo más adecuado es no frotar”. Las razones son que “hay efectos por el trauma físico directo, como funcionales”.
“Se pueden producir erosiones y desgarros retinales, además del aplastamiento de la cámara anterior, pliegues corneales, que alteran el buen funcionamiento celular de los tejidos”, añade.
Quien secunda a la profesional es el oftalmólogo de Clínica Bupa Santiago, Felipe Petour, quien además de afirmar que no es recomendable “bajo ningún punto de vista”, agrega que puede aumentar el riesgo de “queratocono“, una deformación de la córnea.
Sumado a ello, es más probable que se desarrollen infecciones oculares, puesto que las manos están constantemente expuestas a virus y bacterias.
Aunque el experto afirma que no hay una forma adecuada de rascarse los ojos, Von Bischhoffshausen señala algunas licencias: “Si no se puede evitar, pues frotar con la menor presión posible, evitando presionar el globo ocular”.
A ello, la oftalmóloga explica que si hay picazón, lo ideal es aplicar frío local; sin embargo, lo importante es buscar el origen de la molestia.
¿Cómo quitar un residuo del ojo?
Una situación común en la que pueden caer residuos dentro es cuando se desmaquillan o se quitan antiparras y otros tipos de protección, por lo que se tiende a rascarse los ojos para quitarlos.
Sin embargo, la oftalmóloga explica que “el ojo tiene sus mecanismos de limpieza (lágrimas, parpadeo)”, por lo que “frotar cuando hay un cuerpo extraño en el ojo, puede producir erosiones más profundas”.
Por ello, la especialista explica: “Lo ideal es identificar el cuerpo extraño y retirarlo con una varilla de algodón húmedo, con una gasa o con el dedo limpio, si es que se cuenta con la habilidad suficiente para hacerlo”.
“Con cuerpos extraños más pequeños, que no se ven, es muy útil cerrar los ojos y moverlos en todas direcciones durante unos segundos a un minuto. En caso de que se disponga de lágrimas artificiales, su uso puede ayudar a barrer el cuerpo extraño”, añade.
No obstante, si se trata de un elemento químico o que la molestia persista, lo mejor es acudir a un servicio de urgencia para hacer la extracción de manera adecuada.
