Esta enfermedad puede presentar sus primeras señales en la niñez o durante la adultez. Para tratar esta patología existen diferentes métodos que un especialista podría recomendar dependiendo de la situación del paciente.
Existen varias enfermedades que afectan a los globos oculares, muchas de ellas pueden comprometer la visión de una persona y en casos más graves ocasionar una ceguera. Algunas pueden aparecer producto del envejecimiento, factores físicos o también genéticos, como podría ser el caso del estrabismo.
Esta complicación médica se caracteriza porque los ojos no están correctamente alineados, al contrario, apuntan en direcciones totalmente opuestas.
Puede presentarse tanto en adultos como en niños – generalmente a partir de los seis meses de edad- y afectar la vista, ya que se necesita que ambos órganos estén ubicados de forma paralela para ver de manera óptima. El acceso a un tratamiento puede ayudar significativamente a la solución de esta enfermedad.
Según la enciclopedia médica MedlinePlus, de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, cuando una persona padece esta patología “se envían dos imágenes diferentes al cerebro: una desde cada ojo. Si el estrabismo no se trata, el ojo que el cerebro ignora nunca verá bien. Esta pérdida de la visión se denomina ambliopía, también recibe el nombre de ‘ojo perezoso’”.
¿Por qué ocurre esta enfermedad ocular?
Para comprender el origen de esta complicación médica, hay que tener en cuenta que los ojos necesitan de seis diminutos músculos que le otorgan movimiento en diferentes direcciones (izquierda, derecha, arriba o abajo) y juntos permiten enfocar correctamente una sola imagen.
Si bien estas estructuras son controladas por el cerebro, algunos problemas de salud pueden interferir en sus funciones, tales como un tumor cerebral, mal funcionamiento de la tiroides, accidentes cerebros vascular o daños en los músculos de los ojos producto de algún accidente o cirugía previa.
En cuanto a los factores hereditarios, los pacientes pueden presentar señales de estrabismo durante su niñez, pero experimentar síntomas más evidentes durante su etapa adulta. En este sentido, el Dr. Jesús Barrio, especialista en oftalmología de la Clínica Universidad de Navarra (España), afirma que “una de las causas del estrabismo es la herencia familiar, ya que se puede tener cierta predisposición a sufrir este problema”.
Entre los síntomas más comunes se encuentran los movimientos oculares anormales, tortícolis y visión doble. Asimismo, los pacientes pueden presentar debilidad en los globos oculares, molestias alrededor del ojo y perdida de la percepción de profundidad.
Para detectar la enfermedad, basta con que el especialista observe detenidamente y confirme su diagnóstico con exámenes para medir la agudeza visual y evaluar la función motora del paciente. En casos puntuales, se podrían solicitar pruebas más complejas como tomografías o análisis de sangre.
¿Cómo tratar esta enfermedad?
Existen diferentes tratamientos que el especialista puede recomendar dependiendo de la situación del paciente. De acuerdo con la Academia Estadounidense de Oftalmología, hay cuatro métodos usados por los profesionales, entre los que destaca principalmente la cirugía, donde se realizan pequeños cortes en el tejido que recubren el ojo.
Sin embargo, hay otros no quirúrgicos como los ejercicios para los músculos oculares; lentes con prismas, que permite a las personas que ven doble observar solo una imagen, y el bótox, que es inyectado para paralizar los músculos que rodean el ojo, pero su efecto tiene una corta duración, explica la entidad de salud norteamericana.