A tres meses del inicio de la temporada alta de verano 2022-2023, la industria del turismo nacional ha recibido alentadoras noticias. Luego de casi tres años de pandemia, el Gobierno anunció una importante flexibilización de las medidas sanitarias a partir del 1 de octubre, como el uso voluntario de la mascarilla y la eliminación de las exigencias del pase de movilidad y de las limitaciones de aforo. Esto se suma a la anterior decisión de la autoridad de poner fin a la homologación de vacunas para visitantes extranjeros y la proyección al alza del ingreso de turistas al país.
Son buenas noticias que coinciden con la conmemoración del Día Mundial del Turismo -el 27 de septiembre-, y el reciente reconocimiento que obtuvo Chile en los World Travel Awards como el Mejor Destino de Sudamérica, de Turismo Aventura y el Destino Más Romántico, oportunidad que nos permite -tal como lo señala The World Tourism Organization (UNWTO)- concientizar a las autoridades y a la comunidad acerca del valor social, cultural, económico y para el desarrollo sostenible que tiene este sector y su contribución para incentivar la inversión, generar empleos y reactivar la economía nacional y regional.
Desde el pasado Travel Sale, ya comenzamos a notar un incremento en la demanda turística para la próxima temporada de verano, donde las personas, buscando instancias de ahorro, han aprovechado los precios de la preventa. Los números son auspiciosos: en total se contabilizaron más de 3 millones de consultas lo que se tradujo en ventas por más de USD$20 millones.
La intención de viaje está intacta y la demanda poco a poco comienza a incrementarse, llegando a niveles de 2019. Es así que el 85% de nuestros viajeros opta por destinos internacionales, priorizando El Caribe, Estados Unidos y Sudamérica. También se observa una tendencia a elegir destinos nacionales en diferentes momentos del año.
Chile y la región de Latinoamérica se están recuperando en forma importante. Los viajes se acercan a los niveles prepandemia y la capacidad de los aviones está regresando. Esperamos, tal como lo ha planteado el gobierno a través de la Subsecretaría del Turismo, una recuperación de este sector para el año 2023. Si bien recientemente hemos experimentado el alza del dólar, notamos una disminución en el valor de la divisa, lo que nos permite ofrecer atractivos precios para los viajeros.
Como país nos enfrentamos a diversos retos como son posicionar internacionalmente a Chile como uno de los destinos imperdibles a visitar en Sudamérica, buscando aumentar la cuota de mercado en relación a la demanda de los países objetivos; incrementar la inversión y las condiciones de la oferta turística en cualquier temporada y contribuir al desarrollo de un turismo en Chile más sostenible, inclusivo y resiliente.
Así, tras la flexibilización de las medidas sanitarias, el gran desafío ahora es entregar un buen servicio a pasajeros que están ansiosos de volver a viajar, más empoderados y en un mundo en que todavía no hemos vuelto a los niveles de empleo que esta industria solía tener para este volumen de pasajeros.
Para lograr lo anterior es necesario trabajar mancomunadamente entre el sector público y el privado para brindar un servicio de calidad, respetuoso con las comunidades y el medio ambiente.
Los reconocimientos internacionales confirman que Chile tiene un enorme potencial turístico y relevan el trabajo que realizamos empresarios y emprendedores de la industria nacional y regional (mayoritariamente mipyme), por diversificar los destinos y entregar opciones para los diferentes tipos de viajeros.
Sin duda, la conmemoración del Día Mundial del Turismo 2022 nos da una nueva oportunidad como industria para seguir apostando a la recuperación y reactivación de este sector económico, continuar posicionando internacionalmente a Chile como destino turístico y finalmente, cumplir con nuestra misión: ayudar a las personas a viajar mejor.