El senador de Renovación Nacional, Manuel José Ossandón, creó una nueva palabra para definir lo que sería una nueva corriente política tras la positiva evaluación de la diputada del Partido Humanista, Pamela Jiles.

Son los “jilesistas", afirma, para identificar a quienes hoy la apoyan, con tanto entusiasmo que está en el primer lugar de las encuestas con preferencias para elegir al próximo Presidente o Presidenta de la República.

Un nuevo término para definir lo que sería una nueva corriente política sustentada en la positiva evaluación de la diputada del Partido Humanista (PH), Pamela Jiles, acuñó el senador de Renovación Nacional (RN), Manuel José Ossandón.

“Jilesista”, afirma Ossandón, se llamarían los que se plantean amparados en el telón de la diputada de oposición, o la siguen, sobre todo por sus acciones empeñadas en aprobar el tercer retiro, las que la encumbraron en la cima de los políticos mejor evaluados según la última encuesta CEP.

Pero Ossandón cree que, de por medio, hay eslogan y marketing y en ello también incluye a otro favorito, Jaoquín Lavín, de la UDI, quien hace un tiempo declaró ser “socialdemócrata” y antes dijo ser “Bacheletista-Aliancista”, cuando la exPresidenta estaba por las nubes.

“A lo mejor hoy es Jilesista-Chilevamista”, dice Ossandón, a modo de crítica, en todo caso.

También, Ossandón aseguró que él no tiene las puertas cerradas a la candidatura presidencial, sin embargo, dijo que no es el momento de hablar de esa opción, sino que lo que se necesita es aportar para salir de la crisis política y económica que vive el país.

En todo caso, el mismo aclara que “a mí, no me quieren en Chile Vamos”.

Otro cuestionamiento de Ossandón apunta a Cristian Larroulet, jefe de los asesores del Presidente Sebastián Piñera, de quien afirma que ignora lo que ocurre con la ciudadanía.

“Le haría un tremendo ventanal en La Moneda para que viera la calle y entienda lo que pasa afuera”, dice.

Situación política

“Lo que pasa aquí es lo siguiente: el Presidente de la República tiene que asumir en un interior y convencerse que es minoría en el 100% de las comisiones de la Cámara de Diputados y el Senado y si no se sienta a conversar y a llegar a un acuerdo, a un gran pacto fiscal, a un gran pacto previsional hacia el futuro y a un gran pacto de cómo enfrentar la pandemia, vamos a terminar muy mal”, dice Ossandón a modo de evaluación de lo que ocurre hoy.

-En alguna instancia, últimamente, ha podido expresarle su visión al Presidente ¿Puede hablar con el Piñera?

Nunca me han llamado, jamás para un proyecto o algo. El Gobierno tiene siempre la estrategia de llegar con la torta lista al Parlamento, no nos pregunta a nosotros, tampoco les pregunta a los del frente, por eso cae de derrota en derrota. Lo he hecho con los ministros que he podido hablar. Por ejemplo, hace pocos día me reuní con la presidenta del Senado planteándole lo mismo que digo hoy. Lo he conversado con Elizalde, con Insulza, con senadores de derecha, con un montón de parlamentarios de diversos lados. Todos están preocupados de cómo enfrentar lo que viene.

-¿Qué se debe hacer?

Tenemos que sacar los eslogan y esta política de marketing. En el fondo, fijar objetivos claros. Por ejemplo, se habla de los impuestos a los súper ricos. No tengo problema en evaluar eso, pero me gustaría que existiera un gran pacto fiscal que viera todo y que tenga dos objetivos, que los que ganen más, paguen más. Y dos, recaudar más dineros, porque en ese pacto social tenemos que mantener el crecimiento económico y mejorarlo, porque sin eso, no hay impuestos. También se evaden un montón de impuestos, información del SII en reuniones, hay bufetes de abogados muy famosos que tienen empresas de transportes y que tienen uno o dos camiones y generan una utilidad impresionante. Esa es una manera de eludir sus platas, los honorarios los sacan por renta presunta.

-Y, se habla de un cambio de gabinete, ¿qué opina?

Espero que no cometan el error de hacer un cambio de gabinete, porque ya sería un chiste, ya que es una silla musical en que cambian a uno de cada lado. Un ministro que se cambia de cartera se demora como 4 meses en conocer o más a la gente del lado. También, el que manda aquí, el verdadero ministro del Interior se llama Sebastián Piñera. El verdadero ministro de Hacienda se llama Sebastián Piñera, el jefe del equipo político se llama Sebastián Piñera y si él no internaliza esto, ¿Qué va a cambiar? Le echan la culpa a los ministros que ponen la cara y el pecho.

-O sea, quiere “estar en todas”

No quiere, está en todas.

-¿Cree que la decisión del TC fue una derrota o al final se trató de una tabla de salvación para el Presidente?

El resultado de lo que pasó fue la salvación. Si el tribunal acoge habría quedado la grande en Chile esa noche. Pero, por otro lado, se nota que hay seriedad también, demostraron, en esta pasada, que no aceptaron la jugada del Ejecutivo. Ellos iban a quedar como los malos de la película, si en el fondo el Presidente pedía que declararan inconstitucional un proyecto y por la otra ventanilla presentaba otro casi igual. Parecía chiste. Claramente le salvaron la política al Presidente.

¿Presidenciable?

-El tema judicial, la causa Pirque, ¿está zanjada para usted?

Todos tienen derecho a apelar, pero aquí hubo un fallo contundente. A mí me declararon inocente, de los hechos y de derecho, de lo que me acusaban no era delito y que además no había hecho eso, no tenía acciones delictuales. De los 14 jueces, 9 lo declararon y argumentaron y los que votaron en contra ninguno argumentó nada. La gente cree que el fuero es el pituto que tiene un parlamentario y no es así. Es un juicio, pero no hay tres jueces como en una sala, hay 14 o 15. A mí me declararon inocente por algo que no hice, porque en la municipalidad de Pirque hay algo muy complejo, grave y que se sabrá con el tiempo y me usaron para tapar con una cortina de humo. Eso no termina aquí, presenté una querella, tengo pruebas y testigos del fraude al fisco que hay adentro. Con ese fallo y contundencia para mí eso está cerrado.

-Por ese caso, a fines de diciembre su opción presidencial estaba cerrada…

Hoy RN tiene un candidato presidencial que es Mario Desbordes, mientras él esté voy a estar apoyando al candidato de RN, pero creo que los que eligen a lo candidatos no son los partido sino la gente. Miren lo que pasó en la encuesta CEP, espero que se sienten a analizar lo que dice.

-¿Qué lectura hace usted de la CEP?

Como los extremos, sobre todo la extrema izquierda, ha tomado ciertos espacios, porque la centro izquierda y la centro derecha no tienen liderazgos. ¿Quién ahí es el candidato? Este es el candidato de Chile Vamos y este de la Concertación, no hay ninguno. Ninguno marca, así como cuando fue candidata la expresidenta Michelle Bachelet o Ricardo Lagos, donde estaba claro que lideran, que la gente los sigue. Aquí no. Hay que evaluar seriamente hacer primarias en Chile Vamos.

-Usted ha lanzado algunas señales de que está en carrera, ¿Cuál es la firme?

Un político como yo jamás cierra las puertas. No tengo ninguna puerta cerrada, pero soy objetivo. Hoy el problema no es una candidatura presidencial, es lograr y ayudar a que el país llegue a un acuerdo para que salga de la crisis. Si en algún momento, toca apechugar se verá en ese minuto, pero hoy la encuesta CEP es gravísimo para el futuro de Chile lo que se ve. A futuro no hay que seguir con la política de los eslogan, aquí todos tienen que demostrar su capacidad de hacerlo. A mí en Chile Vamos no me van a pedir que sea candidato porque no me quieren, pero lo que me tiene contento, es que todo lo que dije hace tres años, repiten como monitos los candidatos de Chile Vamos.

-Pero y escenario de primarias….

No digo que no sean necesarias, sino que hay que estudiarlas. Hay que ver qué pasa. No hay liderazgos y deben demostrarlo. Por ejemplo, tiene a Joaquín Lavín, que debe demostrar que ha cambiado. Si resulta que cuando era alcalde, contrataba aviones para hacer llover y hace un mes hizo un show en un plaza con gente vestida de blanco diciendo que iban ayudar a los peritos en investigaciones policiales, qué cosa más ridícula que eso. Entonces, seguimos con puro marketing.

Lavín “Jilesista”

-¿Qué debería hacer Lavín?

Si él quiere ser candidato presidencial de verdad, hablemos de cosas serias y no nos cambiemos de una día para otro. Mire, a favor del 10%, luego en contra, después celebrando el proyecto del gobierno, al otro día, no, que promulguen el otro proyecto. Entonces, al final la gente no nos cree y nos pone a todos en el mismo saco.

-Lavín se planteó como socialdemócrata, ¿usted también se define así?

No me planteo nada, me planteo el sentido común, el olfato, la lógica y lo que la gente necesita o quiere es lo que hay que hacer. Esto de andarse etiquetando, porque ahora habría que ser “Aliancista-Jilesista”, ya que antes era “Bacheletista-aliancista”, hoy día es “Aliancista-Jilesista”, una cosa así será.

– O sea, ¿solo faltaría que Lavín apareciera con la pluma que usa Jiles?

Si quiere ser Presidente, tiene que demostrar que cambió, que aquí hay políticas serias y que se acabaron los eslogans y marketing, no solo él, sino todos.

-Pero, ¿cree que Lavín pueda salir con algo así?

No, pero puede ser, a lo mejor es “Jilesista-Chilvamista”.

-De lo nombres que hay en carrera, ¿sale el próximo presidente de Chile?

No lo tengo claro, cincuenta y cincuenta, no hay claridad. Tuve un café con el Presidente al principio de su gobierno, no soy su regalón y no me quiere, él tampoco es mi regalón, pero hablamos del futuro de Chile. Lo que más me acuerdo es que me dijo que los partidos piensan que van a elegir a sus candidatos y el próximo presidente/a y están muy equivocados, va ser la gente y tiene razón.

Tras la sombra de Larroulet

-Se ha hablado mucho de Cristian Larroulet en este último periodo, ¿le asigna la importancia decisiva que le han puesto en las decisiones de gobierno?

Lo que pasa es que tiene una influencia impresionante. Piensa igual que el presidente, son iguales los dos, son iguales y toman las decisiones entre los dos, pero el que corta el queque es el Presidente, pero Larroulet es lejos el más poderoso de todo el gobierno, después del Presidente. Designa a los directores, a los ministros, todo, todo. ¿Sabe lo que le haría a Larroulet?

-¿Qué le haría?

Le haría un tremendo ventanal en La Moneda para que viera la calle. Si él viera la calle y entendiera lo que pasa afuera, mucho cambiaría. Más que atacarlo como persona. Pero él vive en otro mundo, de La Moneda a su casa, es un “chicago boy” cerrado, la economía es lejos lo más importante. Y sí, es uno de los grandes responsables de la crisis que vivimos, es el principal orejero del Presidente.

-Entonces, ¿le ha hecho una flaco favor al mandatario?

Lo que pasa es que en el Gobierno, nadie le dice nada al Presidente, menos él, si piensan igual. Aquí hay un responsable que debe tomar las decisiones, un compadre lleva las riendas, como decimos en el campo, “él que va al anca, puede decir, vamos por aquí o por allá, pero quien lleva las riendas es quien va en la montura”. Ese se llama Sebastián Piñera, no hay que echarle la culpa a Larroulet. El eligió a sus asesores, son iguales, tiene menos pelo no más”, precisó.

Así está, según el senador Ossandón, la política hoy en Chile.