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El coronel Claudio Pavez, prefecto de la Prefectura Santiago Central, detalló que el enfrentamiento con decenas de evangélicos en la Plaza de Armas comenzó alrededor de las 19:15 horas, cuando vecinos se acercaron a Carabineros para denunciar ruidos molestos provocados por un grupo que predicaba en el lugar.

“El personal se aproximó con la finalidad de dialogar e identificar al representante del grupo para solicitar que bajaran el volumen”, explicó el oficial. Sin embargo, al intentar cumplir el protocolo, la situación escaló rápidamente.

Según Pavez, al momento de identificar al líder del grupo, “las personas solidarizaron con él y se produjo una riña”. El resultado preliminar arrojó dos detenidos —un chileno y un extranjero— y cuatro carabineros lesionados.

“Uno -de los carabineros- tiene dolor intenso en el codo; las lesiones podrían ser menos graves”, precisó. Los funcionarios fueron trasladados al hospital institucional, mientras que al menos dos vehículos policiales sufrieron daños durante el incidente.

Reclamos recurrentes por ruidos molestos

El coronel enfatizó que el operativo respondió a reclamos recurrentes. “No es primera vez que estas personas predican sin permisos. El municipio ya había solicitado presencia policial para evitar ruidos molestos en el casco histórico”, dijo. Agregó que el grupo no contaba con autorización municipal para usar el espacio público, pese a ser una situación repetida en el sector.

Sobre la reacción inicial del grupo, Pavez afirmó que “ellos comienzan a tocar, se abalanzan sobre el funcionario. Fue necesario pedir apoyo de personal territorial y de Control de Orden Público (COP)”. La intervención incluyó el uso de “aerosoles disuasivos” para controlar a los manifestantes.

Respaldo al protocolo policial

El coronel defendió las acciones de Carabineros y aclaró que el uso de gas pimienta fue una medida para frenar el ataque. “Aproximadamente 70 personas se abalanzaron contra los funcionarios. Hubo elementos contundentes lanzados contra ellos”, explicó. Insistió en que el procedimiento siguió los protocolos. “Primero se busca dialogar; la fuerza se aplica solo ante resistencia”, añadió.

Pavez destacó que no se registraron civiles lesionados. “Llevamos más de una hora sin que nadie reporte heridos por el accionar policial”, afirmó. Sin embargo, reconoció que los videos en redes sociales muestran forcejeos intensos. “Las imágenes circulantes serán parte de la investigación”, señaló, sin confirmar detalles específicos.

Sobre los detenidos, explicó que uno enfrenta cargos por “oponerse a la identificación” y otro por “lesiones a carabineros”. Ambos permanecen bajo custodia mientras se recaban testimonios y pruebas. “El procedimiento sigue en desarrollo”, advirtió.