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Una conductora logró frustrar una encerrona en su contra en Cerrillos junto a sus hijas de 2 y 10 años, gracias a una astuta maniobra de retroceso. La mujer detuvo su vehículo al notar a un auto con al menos 3 sujetos acercándose, apagando las luces pero dejando el motor encendido para simular que se había detenido. Cuando los delincuentes descendieron, ella retrocedió hábilmente evitando así el robo.

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Una conductora, en compañía de sus hijas, frustró una encerrona en su contra en Cerrillos gracias a una audaz maniobra de retroceso.

El hecho ocurrió anoche en calle Los Rosales.

La mujer circulaba junto a las niñas de 2 y 10 años, cuando vio un vehículo con al menos 3 sujetos en su interior.

Al ver que el auto se acercaba a ellas, sospechó que iban a ser víctimas de un delito, por lo que detuvo la marcha, apagó las luces y les dijo a sus hijas que se sujeteran.

“Vi un auto que estaba en la esquina con las luces prendidas. Ahí, apagué las luces, pero no apagué el motor”, relató la conductora.

La intención era que los delincuentes creyeran que la mujer había apagado su camioneta. Fue así que estos descendieron armados y recién ahí la víctima retrocedió, evitando el robo.

“De repente, el auto se pone atrás mío, yo coloco primera para ver si se bajaban, y no. Se me atravesaron por al frente, y ahí lo único que hice fue retroceder… Ellos se bajaron con las pistolas y lo único que atiné fue a retroceder, nada más. Tiritaba por dentro”, dijo.

La víctima agregó que “gracias a Dios, no abrí el portón. Si abro el portón, me roban la camioneta… Vienen mis bebés. Una viene una silla, la otra con cinturón. Me quitan la camioneta y se las llevan”.

Los delincuentes no insistieron y abandonaron el lugar. No se descarta que hayan participado en otros ilícitos.