La alcaldesa de Cerrillos, Lorena Facuse, rechazó la nueva iniciativa de Google para el Data Center planificado en la comuna y San Bernardo, tras revés ante el Segundo Tribunal Ambiental. La autoridad no aprobó el nuevo proyecto de la empresa que iniciará desde cero.
Este disenso llega después de que se conociera que Google decidió no seguir con la solicitud de permisos para construir un data center en Cerrillos, después de cuatro años de disputas por el uso del agua. Esto a pesar de haber hecho ajustes para cumplir con las exigencias del tribunal ambiental.
La decisión llegó tras la resolución del Segundo Tribunal Ambiental, que acogió las preocupaciones de ciudadanos y autoridades sobre el impacto en el acuífero Santiago Central.
La alcaldesa de Cerrillos no aprueba la nueva iniciativa de Google
Tras el percance vivido ante el tribunal ambiental, Google ahora presentará un nuevo plan desde cero. Este usará tecnología de enfriamiento con aire y requerirá una inversión de 200 millones de dólares.
Lorena Facuse no apoyó el nuevo diseño del proyecto. Señaló que, sin los estudios legales necesarios, no se puede evaluar su impacto ambiental.
“La prioridad es el cuidado del medioambiente”, dijo la alcaldesa. Asimismo, la edil aseguró que en el municipio están a la espera del ingreso de la iniciativa para “poder conocer de fondo el proyecto que ellos tienen”.
Por otro lado, el ministro de Economía, Nicolás Grau, valoró el rediseño. Dijo que muestra el compromiso de Google con Chile y es una señal positiva en términos de inversión.
“La política nacional de Data Center que nosotros estamos impulsando es bien recibida por la inversión privada. Y que estas empresas, más allá de las particularidades de cada proyecto, siguen creyendo en nuestro país”, destacó el ministro Grau.
En febrero, el Segundo Tribunal ambiental había revertido parcialmente el permiso otorgado en 2020, pidiendo incluir los efectos del cambio climático en la solicitud.
El proyecto, que tendrá una vida útil de 25 años, planea construirse en un terreno de 23 hectáreas entre Cerrillos y San Bernardo, en la intersección de Lo Espejo y Camino Lonquén. En 2021 ya enfrentaba desafíos legales por su consumo de agua.