Tareck El Aissami, exgobernador del estado de Aragua y exvicepresidente del regimen de Nicolás Maduro en Venezuela, tuvo como trabajador en su despacho a Walter Rodríguez, uno de los sospechosos por el secuestro y homicidio de Ronald Ojeda. Actualmente, El Aissami está desaparecido en medio de acusaciones de corrupción y narcotráfico.

La Fiscalía investiga el nexo laboral que mantuvo uno de los prófugos por el secuestro y asesinado de Ronald Ojeda, con un exvicepresidente de Venezuela.

Se trata del también venezolano Walter Rodríguez Pérez, uno de los identificados como participante del delito y que se presume habría huido del país.

Tal como reporta El Mercurio, en el Instituto Venezolano de los Seguros Sociales se constató que él trabajó durante siete semanas en la oficina de Tareck El Aissami en el año 2015, cuando ejercía como gobernador del estado de Aragua.

Así se desprende de una constancia electrónica de cotizaciones que el medio La Razón publicó la tarde del miércoles.

BioBioChile revisó la validez del certificado y confirmó que es fidedigno.

Años después, entre 2017 y 2018, El Aissami asumió como vicepresidente del régimen de Nicolás Maduro.

Actualmente, El Aissami se encuentra desaparecido luego que en marzo de 2023 renunciara al ministerio del Petróleo por denuncias de corrupción en la empresa estatal PDVSA.

Además, tiene una orden de búsqueda internacional por acusaciones de narcotráfico.

No se han descartado teorías

Dicha información ya está en poder de la Fiscalía ECOH y la PDI, que trabaja en la indagación de este nexo laboral.

Recordemos que el Ministerio Público no ha descartado ninguna arista en la investigación. Hace algunos días, el fiscal nacional Ángel Valencia señaló que no se puede descartar el móvil político del secuestro, pero también dijo que había que indagar cómo Ojeda se ganaba la vida y cómo financiaba sus gastos.

Además de Walter Rodríguez Pérez, se mantiene prófugo Maikel Villegas Rodríguez, quien también habría huido del país. Ambos tendrían vínculos con el Tren de Aragua y sobre ellos pesa una orden de captura internacional.

En tanto, sigue existiendo solo un detenido por el caso, un adolescente venezolano de 17 años que se encuentra con su situación migratoria irregular. Tras su formalización, quedó en internación provisoria.