En el Octavo Juzgado de Garantía de Santiago se realizó este viernes la primera parte de la formalización contra 12 efectivos de Fuerzas Especiales de Carabineros, quienes son acusados del delito de torturas.
Los hechos ocurrieron el pasado 21 de octubre en Plaza Ñuñoa, en medio de las manifestaciones surgidas tras el estallido social. En aquella ocasión, los uniformados golpearon a un hombre identificado como Moisés Órdenes, lo que fue transmitido en vivo por televisión.
En las imágenes se aprecia cómo los funcionarios lo golpearon con bastones y uno de ellos le propinó una patada que lo hizo caer al suelo. El hombre quedó con trauma ocular cerrado izquierdo grave, trauma torácico cerrado izquierdo contuso, fracturas costales múltiples, fractura dental incisivo central izquierdo, luxación anterior del hombro izquierda reducida y fractura nasal izquierda.
El fiscal jefe de Ñuñoa, Álvaro Pérez, les imputa el delito de torturas y pidió prisión preventiva para todos ellos. Agregó que cinco de ellos abusaron de sus cargos al golpear al hombre sin provocación alguna, y los restantes no evitaron la golpiza.
Durante la audiencia, la defensa solicitó no mostrar los rostros ni dar los nombres y direcciones de los imputados, ya que han sido funados y amenazados. La petición fue acogida por el juez Daniel Aravena.
Además, por petición de la defensa la formalización se suspendió hasta el 23 de diciembre ya que, a su juicio, no habían tenido acceso a todos los antecedentes de la investigación. Así lo aseguró el abogado Mario Vargas.
Desde el Ministerio Público indicaron que el estado de salud del agredido es de gravedad y que perdió un ojo.