El Ministerio de Transportes evalúa frenar la evasión en el Transantiago implementando tecnología que permita el reconocimiento facial de las personas.
Esta mañana, la cartera inició un taller donde participaron ingenieros y especialistas, oportunidad donde se dio inicio a un nuevo plan antievasión que en el primer trimestre de este año se elevó a un 28,5%.
Entre las principales medidas que evalúa el Ejecutivo están nuevos planes de control con Carabineros y un reforzamiento en las zonas pagas, además de la implementación de tecnología que permita, por ejemplo, el reconocimiento facial de los pasajeros a la hora del pago.
Uno de los métodos es el de un tótem con validador y que contiene una cámara a la altura de la cara de la persona. Así, a la hora del pago, se hace un reconocimiento facial con identificación biométrica. De esta forma, si un pasajero no cancela, su rostro no estará asociado al pago, registrándose la evasión.
Así lo señaló la titular de la cartera, Gloria Hutt, quien reconoció que la medición manual no es totalmente representativa.
Según comentó la ministra Hutt, “lo que se está midiendo no es lo comparable con índices de evasión en otros países, lo que dificulta establecer metas”. Por eso, se buscará que el registro considere una evasión en el pago del sistema integrado, tal como explicó la encargada de evasión del Ministerio de Transportes, Ana Luisa Covarrubias.
El ex subsecretario de Transportes, Carlos Melo, concordó con la necesidad de reformular la medición del no pago del pasaje.
El Gobierno insistirá en que la evasión sea medida por una entidad externa como el INE, todo esto a menos de una semana para que entre en vigencia el registro de evasores.