Este martes, el sindicato de trabajadores de la planta Iansa Linares se reunirá con la gerencia de la empresa para conocer el destino de la filial que podría cerrar en 2019.
Ciro Tapia, presidente del gremio, confirmó la noticia al diario El Heraldo, y explicó que “queremos conocer el detalle de los antecedentes que se nos comunicaron sobre el fin del proceso de remolacha hacia el 2019″.
El objetivo de la cita, agregó, es conocer cuál será el futuro de cerca de 500 funcionarios que actualmente se desempeñan en la planta.
Por su parte, el tesorero del sindicato, Patrick Silva, puso sus esperanzas en que el cierre no se concrete, advirtiendo los efectos que podría tener para la región.
“Esperamos que estas decisión se revierta, porque sería un golpe social tremendo para la economía familiar de Linares y de gran parte del Maule Sur”, enfatizó.
Y es que junto con los trabajadores, dependen de la planta también 400 productores de remolacha cuyos cultivos se extienden en 5.700 hectáreas, por lo que se trata de una de las principales actividades económicas de Linares.