Un enorme taco provocó por segundo día consecutivo esta semana la manifestación de trabajadores subcontratados de Enap en Hualpén. Esta es la tercera semana de movilización, en medio de un conflicto donde apuntan a la falta de disposición por parte de la estatal.

Por tercera semana consecutiva continúa la manifestación de los trabajadores subcontratados de Enap Bío Bío, lo que ha provocado, nuevamente, un enorme taco en la costanera de Hualpén.

Los trabajadores incendiaron barricadas, lo que ha provocado que conductores deban tomas desvíos para transitar por el sector de Cuatro Esquinas.

Por segundo día consecutivo en esta semana se registró el corte de ruta en el sector, luego que el lunes cientos de trabajadores, pertenecientes a 12 empresas contratistas de la Enap, protestaron en las afueras de la planta en Hualpén.

Tercera semana de movilización de trabajadores subcontratados de Enap

A una semana de haberse producido el desalojo policial de los accesos que estuvieron bloqueados por 7 días, el presidente de Fenatrasub, Víctor Sepúlveda, dijo que Enap quebró el diálogo al no seguir en la mesa tras la firma de un preacuerdo el día jueves.

El acuerdo del 12 de mayo establecía las condiciones del inicio de una serie de mesas de diálogo entre los trabajadores y las empresas contratistas, en las que Enap haría de facilitador.

Sin embargo, a juicio del director regional del Trabajo, Rodrigo Reyes, la estatal sí tenía la obligación de asistir, pero se restó, por esto la mediación terminó sin resultados.

Hasta ahora, ninguna de las partes ha pedido a la Dirección del Trabajo convocar una nueva mediación, que sería el tercer intento por destrabar este conflicto.

Desde el Gobierno, la delegada presidencial en el Bío Bío, Daniela Dresdner, lamentó que esta instancia fracasara.

En el último comunicado de la Enap, la estatal afirmó que tenía sólo un rol de monitoreo en las mesas de diálogo impulsadas la semana pasada, pero que acceder a solicitudes como la de un bono de 4 millones de pesos para cada trabajador, es una decisión que compete a las contratistas y que está más allá de las facultades que le entrega la ley a todas las empresas públicas del país.