El fiscal Juan Yáñez, quien tiene dedicación exclusiva para investigar hechos de violencia rural, afirmó que el principal problema en las indagatorias para dar con los responsables de los ataques incendiarios es la falta de testigos.

Además, afirmó que si bien se requieren más atribuciones para abordar la problemática que aqueja a la Macrozona Sur, hay que partir con un trabajo preventivo.

Las declaraciones del fiscal las entregó tras un nuevo ataque incendiario en el sector Huillinco, camino a la comuna de Cañete, en la región del Bío Bío, donde encapuchados quemaron maquinaria y camiones forestales de un fundo que pertenece a Bosques Arauco.

Según precisó Yáñez, “nuevamente nos vamos a enfrentar a situaciones donde el Ministerio Público tiene testigos que dicen que vieron, pero después (dicen) que no vieron, que les contaron, que este fue, que no fue, etc, y eso nos complica en exceso la investigación”.

A su juicio, “ese es nuestro principal problema. Ante la sensación de inseguridad, los testigos no quieren declarar y la opinión pública tiene que saber que la única forma de llevar esto adelante (el proceso investigativo) es teniendo testigos y levantando evidencia”.

Además fue crítico respecto a la estrategia que actualmente se está empleando para abordar la violencia rural. “En la forma en que hoy en día se está trabajando es muy difícil obtener las evidencias y pruebas que nos permitan llegar a resultados”.

Si bien afirmó que se requieren mayores atribuciones, lo que “se necesita es que exista prevención”, insistiendo que requieren “que no se vuelvan a repetir estas situaciones”.