La Fiscalía de Iquique confirmó que instruyó a la Policía de Investigaciones (PDI) hacerse cargo de la indagatoria por los hechos ocurridos el sábado en Iquique, donde una manifestación terminó con una turba quemando pertenencias de migrantes en la intersección de Aeropuerto con Las Rosas.
Según indicó la fiscal Jócelyn Pacheco, la policía concurrió al sector, levantó un catastro y constató que no hubo extranjeros lesionados por estos hechos.
“Se solicitó también como diligencia que recabaran los videos de seguridad de las cámaras municipales que pudieran haber captado este hecho”, detalló.
A eso se suma que la policía también revisará las imágenes grabadas por particulares e incluso medios de comunicación para dar con los líderes o incitadores.
Gobierno pide escuchar más propuestas que críticas
La crisis humanitaria que vive Tarapacá, derivada de la migración ilegal, lleva meses hirviendo, pero el sábado estalló.
La semana pasada dejó, por ejemplo, el despeje de Plaza Brasil, espacio público que llevaba más de un año ocupado en su mayoría por extranjeros.
La marcha del sábado se venía convocando hace semanas y siempre se aseguró que no era contra los migrantes sino que contra la inactividad de las autoridades al respecto.
El evento logró reunir cerca de 4 mil personas, pero los primeros incidentes ocurrieron en el sector costero de la mano de un grupo minoritario.
Finalmente, la concentración dio paso a la quema de carpas, enseres, juguetes y documentos de 30 personas.
Ese día, previo a la marcha, el ministro del Interior, Rodrigo Delgado, subrayaba que la intención del Gobierno era tener una migración ordenada y que ya era hora de escuchar más propuestas que críticas.
“El problema que vivimos hoy tiene origen justamente en países que han sido castigados por regímenes políticos que han estado contra la gente, que hace que esa gente salga a deambular por América Latina”, afirmó.
Ayuda en traslado
Tras acusar que el Gobierno y el presidente Sebastián Piñera tienen responsabilidad en esta crisis, el gobernador José Miguel Carvajal anunció que se dispondrá de buses para que los migrantes que tengan familia o amigos en otras zonas de Chile vayan a su encuentro.
Aquello se realizará en coordinación con empresas y municipalidades.
A eso se suma la habilitación de albergues provisorios con agrupaciones de migrantes a partir de este lunes.
“Los migrantes que tenemos en la región necesitan irse a otros lugares donde tienen familia o amigos. Tenemos un primer transporte mañana (hoy lunes)”, dijo al respecto Carvajal.
INHD molesto
El director del Instituto Nacional de Derechos Humanos, Sergio Micco, indicó que, a su juicio, Chile está pagando los costos de no tener una política de Estado en la materia.
“Es evidente que si los chilenos solamente hablamos de migrantes a propósito de expulsiones y desalojos esto favorece la xenofobia y el racismo. Demandamos al Gobierno a aplicar la Ley de Migración de forma inmediata”, comentó.
Consultado por Radio Bío Bío sobre el actuar de Carabineros en la marcha, que terminó sin detenidos, el delegado presidencial de Tarapacá, Miguel Ángel Quezada, afirmó que el trabajo fue disuasivo, de anticipación, para evitar robos.
La autoridad se comprometió a apoyar la búsqueda de los responsables directos.
Albergue
Con los hechos del sábado, la idea de crear un gran albergue en Tarapacá reflotó con fuerza, eso a modo de dar alojamiento a quienes entren al país ilegalmente con miras a trasladarse a otras partes del territorio.
En la zona corren rumores que la ONU ofreció una estructura de este tipo, pero que el Gobierno la habría rechazado.
De ser así o no no hay nada claro, ya que oficialmente no se ha confirmado ni descartado.
Lo que sí se conoce es que el Consejo Regional tendría que ver la factibilidad de aprobar o no montos del fondo nacional para levantar una estructura que costaría $1.800 millones.
¿Por qué se sabe la cifra? Porque, por ejemplo, colegios y otros edificios ya han servido de albergues, llevando a agrupaciones y activistas a estimar cuánto costaría una solución algo más definitiva.
De acuerdo a las cifras oficiales, entre 250 y 300 personas ingresan a Chile por pasos no regulados diariamente.