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Un grupo reducido de personas se congregó frente al Tribunal Oral en Lo Penal (TOP) de San Fernando, Región de O\'Higgins, para expresar su postura antes de la lectura de sentencia de Eduardo Macaya Zentilli, condenado por dos delitos de abuso sexual impropio reiterado contra menores de edad, por los cuales la Fiscalía solicitó 12 años de cárcel. Los manifestantes clamaron por justicia verdadera y condena para Macaya, subrayando que los niños merecen ser felices y no ser víctimas de la pedofilia. Una de las presentes compartió su historia, revelando que su nieto fue abusado por Macaya, destacando su lucha de cuatro años en busca de justicia ante la falta de creencia en las acusaciones hacia el victimario.

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Un grupo pequeño de personas llegó este viernes al acceso del Tribunal Oral en Lo Penal (TOP) de San Fernando, región de O’Higgins, para manifestarse previo a la lectura de sentencia de Eduardo Macaya Zentilli.

Recordemos que el hombre de 72 años fue condenado como autor de dos delitos de abuso sexual impropio reiterado contra menores de edad. Por este hecho, la Fiscalía pidió una penal total de 12 años de cárcel.

“¡Justicia de verdad, esa es la que queremos. Los niños tienen derecho a ser felices. No a la pedofilia, cárcel para (Eduardo) Macaya!”, se escuchó por parte de quienes estaban en el exterior del tribunal.

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En el lugar, una de las manifestantes contó que llegó al lugar por su nieto. “Por él estoy acá, hace cuatro años que estoy esperando que se haga justicia. El 2021 el niño me contó que lo estaba abusando”, relató la mujer.

Acto seguido, agregó que “al niño no le creyeron (…) él (victimario) sólo fue imputado, pero no lo condenaron y aquí mismo se hizo el juicio. Nadie le creyó, yo sigo creyéndole”.

Al ser consultada por las razones de que esté presente, reiteró “por mi nieto, por todos esos niños que son callados, por todo pero más por mi nieto. Llevo cuatro años con este dolor”.