Con la medida cautelar de prisión preventiva quedó el patrón de la embarcación “Río Cholguaco”, que el domingo naufragó en Bahía Mansa y dejó siete personas muertas en la provincia de Osorno.
Así se resolvió en la audiencia de formalización de cargos desarrollada esta tarde en el Juzgado de Garantía de Osorno, donde el Ministerio Público imputó los delitos de homicidio simple con dolo eventual y 24 lesiones menos graves.
Sin licencia ni autorización de zarpe
La fiscal María Angélica de Miguel expuso que el imputado decidió sobrecargar la lancha sin contar con las medidas de seguridad necesarias y a pesar de conocer el riesgo que esa acción implicaba.
También reveló que la embarcación tenía autorización de zarpe, pero a nombre del padre del imputado, quien es dueño de la embarcación siniestrada, quien estaba a bordo de la nave esa fatídica jornada.
Por tanto, el acusado no tenía autorización de navegar ni zarpar. Sumado a eso, se estableció que no tenía su licencia vigente.
Además, para solicitar la autorización de zarpe, se entregó una nómina incompleta de los pasajeros, reportando solo 22 personas, aunque en total subieron 34. Tampoco reportó que iba sin tripulante y en su lugar iba una adolescente de 16 años.
Debido al aumento en el número de pasajeros, no todos los ocupantes habrían tenido chalecos salvavidas.
La Fiscalía detalló que los sobrevivientes relataron que cuando comenzó la emergencia, el imputado les dijo que estaba todo bajo control, que tenía experiencia en navegar en esas condiciones y les aseguró que la Armada monitoreaba la embarcación, lo que no era cierto. También le habría pedido a los pasajeros no pedir ayuda.
Los primeros antecedentes recabados por el Ministerio Público da cuenta que tampoco pidió ayuda y no usó la radio de la embarcación para esos fines. Pasajeros aseguraron que fue el primero en abandonar la nave, sin prestar ayuda a los afectados.
Defensa refuta acusación de la fiscalía
No obstante, el defensor público Sebastián Contreras, que representa al imputado, refutó los antecedentes expuestos por la Fiscalía, asegurando que algunos pasajeros afirmaron que todos tenían chalecos salvavidas.
A juicio del abogado, su representado tuvo un actuar negligente, pero no existe dolo, por tanto, apuntaba a una formalización por cuasidelito de homicidio.
Además, desmintió las versiones respecto a que no prestó colaboración durante la emergencia y que fue el primero en abandonar la nave.
Tras la formalización de cargo, el imputado seguirá en prisión preventiva en el CCP Osorno. En la instancia se fijó en 150 días el plazo de la investigación.