El fiscal regional de Los Lagos, Marcos Emilfork, presentó su renuncia indeclinable al fiscal nacional Jorge Abbott, tras 15 años en el Ministerio Público, tiempo en el que asumió el caso de la muerte de Lisette Villa al interior de un hogar del Sename, que fue ampliado eventualmente hacia otros delitos que se habrían cometido al interior de la institución.
Si bien su periodo como fiscal regional finalizaba el 28 octubre próximo, Emilfork presentó su dimisión a partir del ocho de septiembre.
Marcos Emilfork comenzó como fiscal adjunto de la Fiscalía Regional Metropolitana Sur y se desempeñaba -en la actualidad- como fiscal Jefe de la región de Los Lagos.
En específico, el ahora exfiscal presentó su renuncia por medio de una carta dirigida a Jorge Abbott, sosteniendo que “no puedo soslayar las diferencias que hemos mantenido y mantenemos sobre la visión institucional de la Fiscalía de Chile, su autonomía, gestión y el rol del Fiscal, todo lo cual lo he manifestado en las instancias institucionales pertinentes con franqueza, respeto y siempre constructivamente”.
En el escrito destacó sus diferencias en la conducción del Ministerio Público Nacional, por las muertes e irregularidades al interior de los hogares del Servicio Nacional de Menores y por su salida del denominado caso Ascar, luego de interrogar como imputados a los exministros de Justicia, José Antonio Gómez y Javiera Blanco.
Precisamente esta última fue quien se querelló contra Emilfork por presunta violación de secreto, al revelarse su calidad de imputada por las irregularidades en el plan para mejorar la calidad de vida de los niños y niñas internas en hogares del Sename.
Asimismo, destacó que la semana pasada los tribunales de justicia descartaron en forma definitiva su presunta responsabilidad en el delito antes señalado.
“Absoluta independencia”
A su vez, señaló en la misiva que durante todos sus años como fiscal se dedicó a hacer su trabajo anteponiendo “siempre el interés público sobre el personal, tomando las decisiones que cada caso ameritaba y con absoluta independencia, aún cuando ellas pudieran traer aparejados costos para el futuro de mi carrera profesional”.
“Dejo una Fiscalía Regional integrada por un equipo humano cohesionado en torno a la búsqueda de la excelencia, los valores institucionales, la humanización en el ejercicio de nuestras funciones, la entrega hacia los demás y la innovación, siempre con una profunda y marcada vocación real por las víctimas de los delitos”.
Luego de la muerte de Lisette Villa -de 11 años de edad- en el Cread Galvarino de Estación Central, Emilfork encabezó una investigación que se tradujo en 3.200 declaraciones tomadas, 1.200 informes, 645 especies incautadas y que determinó que hubo 878 fallecidos al interior de estos hogares dependientes del Estado.
En el caso de Villa, el fiscal renunciado acusó en mayo pasado a las cuidadoras Connie Fritz y Thiare Oyarce por apremios ilegítimos con resultado de muerte y pidió siete años de cárcel para ambas.