El fiscal regional de Arica y Parinacota, Mario Carrera, se refirió a la recta final del juicio contra los 38 acusados de integrar la organización criminal Los Gallegos.
Y es que después un año de investigación, donde participaron más de 50 testigos, la Fiscalía busca 11 penas perpetuas para los imputados a quienes se les acusa de homicidio, secuestro, tráfico de drogas y migrantes.
En conversión con Radio Pauta, el fiscal abordó los pormenores del juicio y entregó detalle sobre la investigación que permitió detener a la banda.
“Este grupo empezó a llegar el 2018 y ya con fuerza se instalaron y pasaron a tener el control de la región el 2022, que fue el peor año que tuvimos en varias de nuestras mediciones. El homicidio, por cierto, ese año se elevó sustancialmente a lo que estábamos acostumbrados”, partió comentando.
“Afortunadamente, eso ha cambiado, lo que quiere decir que no es lo mismo tener esta gente fuera que dentro de la cárcel. El 2022 cerramos con 46 homicidios y ahora estamos con 20 aproximadamente. Entonces no es que esté todo bien ni tranquilo, pero evidentemente bajar la tasa de homicidios en más de la mitad es un logro a las circunstancias que estamos viviendo”, agregó Carrera.
El fiscal también indicó que al inicio de la investigación desconocían la existencia del apodado “Tren de Aragua”. Es más, solo supieron de ellos gracias a testimonios de vecinos y de otros criminales que estaban asustados por su violento actuar.
“Ellos con temor y miedo decían que había llegado este grupo que tenían casas de tortura y le estaban quitando el negocio. Y para nosotros fue muy decidor escuchar a criminales asustados por un grupo nuevo que había llegado y encendió la alarma”, añadió.
“Su sello es la violencia y cualquier tipo de operación criminal en la que puedan lucrar, van a estar presentes. Por eso digo que en algún momento del 2022 tuvieron el control de la ciudad, porque toda operación criminal que ocurría era realizada por ellos o con la autorización de ellos”, complementó.
Fiscal Carrera por recta final del juicio contra Los Gallegos
Sobre las lecciones aprendidas tras las 83 jornadas de juicio oral que llevaron adelante, el fiscal aseguró que es necesario que “los fiscales que investiguen no sean de la misma ciudad donde esté afianzada este tipo de organizaciones”.
“Tenemos que poner el ojo en el tribunal porque con los jueces ocurre algo similar. Esto no ha sido todavía objeto de algún proyecto de ley, pero cuando recién se asignaron los jueces, tuvimos una gran cantidad de jueces que se comenzaron a inhabilitar por miedo”, agregó.
Por último, el persecutor se refirió a la sensación de inseguridad que continúa en Arica, donde indicó que pensar que “porque detuvimos a cerca de 60 sujetos en total esto se acabó, la verdad es que sería bien ingenuo”.
“Ya hay operando algunos grupos de nacionalidad colombiana que nos llaman mucho la atención. Hay que estar atentos, porque reitero que las condiciones que vieron en Chile y en nuestra región se mantienen. Entonces, si no son ellos, pueden llegar otros”, cerró.