Durante el segundo gobierno de Sebastián Piñera, la Universidad San Sebastián (USS) experimentó un significativo aumento en sus ingresos por servicios prestados a entidades públicas, sumando más de $7 mil millones.
La mayor parte de estos recursos provino del Ministerio de Educación, con tratos directos firmados por la exministra Marcela Cubillos, reveló el medio Ciper.
Además de los pagos del Ministerio de Educación, el reportaje destacó que organismos dependientes del Ministerio de Salud durante el gobierno de Sebastián Piñera también fueron una importante fuente de ingresos para la USS, al haber cancelado más de mil millones de pesos por servicios de laboratorio durante la pandemia. “Entre 2020 y 2022, los laboratorios de la USS procesaron más de 700 mil exámenes PCR para confirmación diagnóstica”, explicaron desde la USS al citado medio.
En total, los organismos de salud emitieron más de 120 órdenes de compra a la USS, sumando $2.169 millones entre 2018 y 2021. Este aumento en los ingresos de la USS se produjo especialmente durante la pandemia de Covid-19, cuando la universidad ingresó a la Red de Laboratorios Universitarios, financiada por el Ministerio de Ciencias.
Contratos ejecutados durante administración Piñera con la USS
Uno de los aspectos más relevantes del reportaje es que, a pesar de que varios contratos fueron ejecutados durante el gobierno de Piñera, estos no fueron regularizados hasta la administración del presidente Gabriel Boric. Uno de estos contratos, por $1.900 millones, fue regularizado en septiembre de 2022, aunque los servicios ya se habían prestado antes del cambio de mando. En ese contexto, la Contraloría General de la República advirtió: “Esa institución, en lo sucesivo, deberá oportunamente suscribir y sancionar los convenios como el de la especie”.
Entre las figuras claves relacionadas con este proceso, se encuentra el exministro de Salud Enrique Paris, quien en 2022 asumió la presidencia del Instituto de Políticas Públicas de Salud de la USS. “El procesamiento de muestras PCR por parte de la USS no fue gestionado por mí”, aseguró el exministro a Ciper.
Paris no fue la única autoridad vinculada al Ministerio de Salud que ingresó a la USS. El exsubsecretario de Redes Asistenciales, Arturo Zúñiga, también se integró a la universidad en 2021.
Zúñiga, quien además formó parte del Comité Asesor que asignaba recursos a la Red de Laboratorios Universitarios, negó haber realizado gestiones para beneficiar a la USS durante su tiempo en el Ministerio de Salud. A pesar de ello, la universidad fue una de las instituciones que más contratos recibió bajo esta red. “La USS es la universidad que más transferencias recibió durante la primera etapa de la Red”, señala el reportaje.
Contrato USS con servicio de Salud Metropolitano Norte
Uno de los contratos más significativos fue el firmado entre la USS y el Servicio de Salud Metropolitano Norte por el procesamiento de exámenes PCR. El acuerdo estipulaba el procesamiento de 10.500 exámenes mensuales, con un valor fijo de $5 mil por examen. Este contrato fue autorizado por el entonces director del Servicio de Salud, Guillermo Hartwig, quien previamente había trabajado en la Facultad de Medicina de la USS.
El aumento en los ingresos de la USS por estos servicios llamó la atención de la Superintendencia de Educación, que abrió una investigación sobre los tratos directos firmados con la universidad. Esta situación también generó cuestionamientos sobre la relación entre las autoridades de salud que lideraron la pandemia y sus posteriores vínculos con la USS.
Desde la universidad, explicaron que “los requerimientos fueron coordinados por los servicios de salud respectivos, bajo la supervisión de las autoridades de esos organismos”.
En la misma línea, Ciper reveló que en noviembre de 2022 se regularizó otro contrato con la USS por un monto de $1.966 millones, correspondiente a servicios prestados entre enero y septiembre de ese año. La Contraloría, al revisar este acuerdo, señaló que el contrato fue suscrito con varios meses de retraso. A pesar de ello, solo se pagaron $892 millones, dado que los servicios no se ejecutaron en su totalidad.
Otras universidades registraban precios más bajos
Además de la USS, otras universidades también participaron en la Red de Laboratorios Universitarios durante la administración Piñera, aunque sus contratos fueron suscritos a tiempo. Instituciones como la Universidad de O’Higgins y la Universidad de Playa Ancha firmaron convenios antes de prestar servicios, con tarifas más bajas que las de la USS. Por ejemplo, la Universidad de Magallanes registró precios de $1.618 por muestra procesada.
Finalmente, Ciper detalló que el caso de la USS no es el único en el que se detectaron irregularidades en la tramitación de contratos durante la pandemia. La Universidad Andrés Bello también enfrentó retrasos en la regularización de un contrato por secuenciación del genoma del SARS-CoV-2, lo que motivó la apertura de un sumario administrativo en el Ministerio de Salud.
Ante estos hechos, el exministro Enrique Paris prefirió no emitir declaraciones sobre los contratos firmados bajo su administración, mientras que la USS destacó que las medidas adoptadas durante la pandemia estuvieron en línea con las normativas de emergencia vigentes.