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La Ministra de Salud, Ximena Aguilera, ha admitido la posibilidad de implementar vigilantes armados dentro de los centros de salud del país como medida de disuasión ante la creciente violencia y amenazas que han enfrentado estos recintos. En una entrevista con TVN, Aguilera enfatizó en la importancia de garantizar la seguridad de los trabajadores de la salud, mencionando que están abiertos a considerar todas las medidas necesarias. Legisladores como el senador Juan Luis Castro y el diputado Andrés Celis también han expresado su apoyo a esta propuesta, considerando los centros de salud como infraestructura crítica en medio de un preocupante aumento de agresiones, documentado en el Sistema de Reportabilidad de Agresiones al Personal de Salud del Ministerio de Salud.

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Tras los últimos hechos de violencia y amenazas que han debido experimentar diversos centros de salud en el país, la ministra de Salud, Ximena Aguilera, admitió que están viendo la posibilidad de que vigilantes armados se encuentren al interior de estos recintos.

En conversación con TVN, la secretaria de Estado dijo que este tipo de presencia genera “un efecto disuasivo y por cierto, si ocurre algo, pueden controlar de alguna manera”. En ese sentido, afirmó que están abiertos a considerar todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los trabajadores de la salud.

No obstante, agregó, el foco estará puesto en “dar las atribuciones hacia las personas que están a cargo de la administración de los establecimientos para tomar las medidas que ellos consideren”.

Impresión de legisladores

Al respecto, se refirió el senador del Partido Socialista, Juan Luis Castro, quien incluso propuso la “colaboración de las Fuerzas Armadas, ya que los centros de salud también son infraestructura crítica”.

En esa línea también se manifestó el diputado de Renovación Nacional, Andrés Celis, quien recordó la ley de infraestructura crítica y afirmó que la propuesta de Aguilera llega “de forma tardía, pero que podría ser necesario dada la inseguridad desbordada en estos espacios”.

El incremento en los casos de agresiones ha sido documentado en el Sistema de Reportabilidad de Agresiones al Personal de Salud del Ministerio de Salud, que hasta mediados de septiembre contabilizó 7.319 agresiones contra funcionarios sanitarios públicos, lo que equivale a un promedio de 28,5 ataques diarios.