El presidente Gabriel Boric fue bendecido por un grupo de evangélicos que predicaba a personas en las calles de Punta Arenas.
Se trata del Ministerio Familiar Cristiano, quienes culminaron un retiro espiritual el pasado sábado, con una predicación persona a persona, encontrándose en plena plaza de Punta Arenas con el mandatario.
Según relató a BioBioChile uno de los organizadores de la actividad, Marco Velásquez, tras percatarse de la presencia del presidente Boric, decidieron ir a bendecirlo, como una forma de poner en práctica lo que la misma Biblia señala, enfatizando que no tienen un color político.
De hecho, resalta que en la segunda carta del apóstol Pablo a Timoteo, en el capítulo 2, se pide hacer “oraciones y súplicas por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que llevemos una vida tranquila y reposada en toda piedad y dignidad”.
De acuerdo a Velásquez, el presidente Boric aceptó gustoso que el grupo de evangélicos intercedieran por él, tal como lo muestra además un video donde registraron la oración.
“Padre, en el nombre de Jesús, en esta hora oramos por nuestra autoridad, como tú lo mandas. Oramos y bendecimos, Señor, su vida en esta hora en nombre poderoso de Jesús”, pidió el propio Velásquez.
“Padre, yo oro por él para que tú le des la sabiduría, como le diste a Salomón, para gobernar la tierra, para gobernar su pueblo”, agregó.
“Oramos, Señor, por su familia, los cubrimos con tu sangre, en el nombre poderoso de Jesús. Anulamos y rompemos toda palabra de maldición lanzada en contra de él, en contra de su familia, de su entorno, su gabinete de trabajo”, añadió.
“En el nombre poderoso de Jesús bendecimos su vida”, concluyó la intercesión por el presidente Boric.
“Muchas gracias, chiquillos, un gusto, que les vaya bien”, señaló un sonriente mandatario luego de ser bendecido.
Al respecto, Velásquez explicó que se trata de un grupo de jóvenes que salen a evangelizar, compartiendo sus experiencias de vida, destacando que muchos de ellos han logrado superar depresiones y la adicción a las drogas.
“El orar por los que nos gobiernan, como presidentes o alcaldes, es una orden, hay un llamado a orar, sin colores políticos, y pese a no estar de acuerdo con sus ideas. Para nosotros fue un agrado, un honor, hacerlo por el presidente”, subrayó.
“Hay que estar orando para que tomen buenas decisiones, porque si toman malas decisiones, eso a nosotros nos afecta”, sentenció.