Dos flancos se abrieron esta semana en la relación entre el Partido Comunista y el Gobierno. La salida de Juan Andrés Lagos de la Subsecretaría del Interior y los dardos cruzados por el alza de las tarifas eléctricas generaron diversas reacciones en el oficialismo, que tendrá que limar asperezas para enfrentar el segundo semestre del año.

El primer episodio motivó una guerra de declaraciones entre militantes del PC y el Ministerio del Interior.

Fue este miércoles cuando La Moneda comunicó que Juan Andrés Lagos, periodista de 70 años, dejaría de asesorar al subsecretario Manuel Monsalve. Si bien el líder comunista contaba con un historial de polémicas que hacía presagiar su salida, la decisión no fue mirada con buenos ojos desde el partido.

El presidente de la tienda, Lautaro Carmona, señaló que se enteraron “por la prensa” de tal decisión, lo que fue refrendado por el propio Lagos. “A mí nunca se me dijo que estaba ad portas de una situación que iba a concluir con mi salida”, sostuvo este último a Radio Nuevo Mundo.

Sin embargo, tal versión fue desmentida por Monsalve, quien aseguró que nunca termina un vínculo laboral con un funcionario sin conversarlo previamente.

Pero las diferentes entre el Partido Comunista y el Ejecutivo no terminaron ahí, ya que el descongelamiento de las tarifas eléctricas provocó un cortocircuito entre la diputada Karol Cariola y el ministro Diego Pardow.

“Le pedí poder informar abiertamente cuál era el porcentaje de alza que se proyectaba. Esa información nunca estuvo a disposición de manera precisa en el debate”, arremetió la presidenta de la Cámara.

El primer golpe: Lagos se despide de Interior

Juan Andrés Lagos protagonizó diversas controversias durante su estadía en la Subsecretaría del Interior.

Una de ellas guarda relación con el asesinato del teniente venezolano Ronald Ojeda. Si bien el Gobierno pidió no descartar ninguna hipótesis al respecto, el militante comunista criticó las “especulaciones terribles” que apuntaban a una intervención del régimen de Nicolás Maduro.

Meses más tarde, participó de una movilización en apoyo al alcalde Daniel Jadue antes de ser formalizado por delitos de corrupción. El propio Monsalve había criticado la presión ejercida por el PC, por lo que la oposición tildó de “incoherente” a La Moneda por mantener a Lagos en su cargo.

La oposición pidió en reiteradas ocasiones el despido del comunicador, lo que se concretó finalmente este miércoles. Una vez consumado el adiós, voces del PC acusaron una suerte de “anticomunismo” hacia sus militantes.

Sin embargo, Patricio Navia, académico de la Escuela de Ciencia Política de la Universidad Diego Portales (UDP), indicó que “Lagos se la buscó. Si tenía un trabajo de asesor tan importante para el Gobierno, no debería haber tenido una participación política tan evidente. No es un problema anticomunista”.

Por su parte, Marcelo Mella, analista político y académico de la Universidad de Santiago (Usach), opinó que era un conflicto perfectamente evitable.

“Demuestra una falta de gobernanza dentro del oficialismo, que viene siendo cada más notoria, y una ausencia del Presidente de la República en ordenar la relación entre los distintos partidos”, apuntó.

Con todo, la cúpula del Partido Comunista quedó molesta con Interior por esta repentina determinación. Lautaro Carmona, presidente de la colectividad, aseveró que no le mandaron ni siquiera un mensaje por WhatsApp.

No obstante, la jefa de la cartera, Carolina Tohá, puso las cosas en su lugar al afirmar que los asesores no pueden cuestionar este tipo de definiciones. “La autoridad es la que decide en qué momento podemos contribuir en un lugar o en otro”, zanjó.

Las tarifas que electrizaron al oficialismo

Los roces no sólo se produjeron por la salida de Juan Andrés Lagos, sino también por el alza de las tarifas eléctricas que comenzará a regir a partir del próximo 1 de julio.

Cabe recordar que las cuentas se mantienen virtualmente congeladas desde 2019. Aquel año se despachó la primera de las tres leyes que han estabilizado los precios para los clientes regulados.

El pasado 10 de abril, el Senado aprobó un cuarto proyecto, el cual pretendía solucionar la implementación del Mecanismo de Protección al Cliente (MPC). Aquella iniciativa permitió contener un aumento que podría haber llegado al 150% en algunos casos.

Sin embargo, se estableció un descongelamiento gradual de las tarifas para llegar al costo real, lo que no tiene del todo contenta a la denominada “bancada eléctrica”. Este grupo, integrado por parlamentarios desde la UDI al PC, se ha esforzado por impedir que aumente el precio de la electricidad.

La última iniciativa incorpora un subsidio al 40% más vulnerable del Registro Social de Hogares (RSH), lo que se traduce en un millón y medio de familias. Esta cifra es considerada insuficiente por los legisladores, quienes exigen aumentar el número de beneficiarios.

En ese contexto, la presidenta de la Cámara, Karol Cariola (PC), dijo a Radio Pauta que solicitó al ministro Diego Pardow informar abiertamente cuál era el porcentaje de alza que se proyectaba.

“Esa información nunca estuvo a disposición de manera precisa en el debate. Yo no sé si el ministro no lo tenía proyectado tan claramente, si habían datos que todavía no tenía en ese momento”, explicó la congresista.

Pero el titular de Energía no se quedó callado, sino que recordó que Cariola votó en contra de la propuesta del Gobierno para estabilizar los precios de la luz en abril pasado. “Supongo que la información que le fue proveída en su momento y las reuniones que tuvimos no fueron suficientes para convencerla”, sentenció.

Quien también se sumó al debate fue el diputado Eric Aedo (DC), vicepresidente de la Cámara. El compañero de Karol Cariola en la testera defendió a Pardow y aseguró que entregó todos los antecedentes sobre el alza de las tarifas. “Siempre hablaron que podíamos tener alzas de un 40% y más”, manifestó.

¿Cómo queda la relación del PC con el Gobierno?

El académico Marcelo Mella considera que estos conflictos generan conflictos en el oficialismo a nivel del proceso legislativo. Pero no sólo eso, ya que “también introducen ruido y mayores costos en la negociación municipal y de gobernadores”.

Las fuerzas de gobierno están lejos de concretar un acuerdo por los candidatos a gobernadores. De hecho, a diferencia de los alcaldes, no lograron sellar una primaria para aspirantes en las 16 regiones del país.

Si bien han insistido que enfrentarán aquella elección en unidad, episodios como estos no aportarían a esa causa. Incluso, Lautaro Carmona deslizó que, de no llegar a un entendimiento, podrían correr por cuenta propia en todos los territorios de Chile.

Patricio Navia se refirió al caso puntual de Juan Andrés Lagos, afirmando que sólo era un asesor y que no correspondía armar tanto alboroto. “El Partido Comunista le está atribuyendo una importancia mayor a la que realmente tenía, está exagerando la omisión del Gobierno”, expresó.

En esa misma línea, Marco Moreno, director de la Escuela de Gobierno y Comunicaciones de la Universidad Central, cree que el pragmatismo del PC no permitirá que esta disputa con el Ejecutivo se siga prolongando.

Incluso, piensa que esta salida podría tener compensaciones por parte de La Moneda al Partido Comunista, probablemente con nuevos cargos. “Creo que la relación con el PC queda sin cambios, porque no sólo salió Lagos, sino también dos militantes del Partido Socialista”, complementó.

Respecto al cruce entre Cariola y Pardow por las tarifas eléctricas, Marcelo Mella aseveró que “cuesta entender que no haya habido una coordinación fina respecto de la implementación de este proyecto. Hay un déficit de conducción que ha sido muy complejo durante estos dos años”.

Pero no sólo la conducción sería el problema, sino también el acoplamiento entre los distintos partidos. Este viernes, Cariola comentó su voto en contra a la iniciativa de abril, explicando que “advertí que encarecería aún más las tarifas para la ciudadanía, que dicha alza no era sostenible para las familias chilenas”.

Aquello fue apoyado por el diputado Tomás De Rementería (PS), quien se abstuvo en aquella instancia. “El tiempo nos dio la razón de que el mecanismo no era bueno. Se puede corregir”, dijo.

Sin embargo, el presidente de Revolución Democrática, Diego Vela, sostuvo en conversación con La Tercera que todos los antecedentes estuvieron sobre la mesa al momento de tramitarse el proyecto.

“Hay una responsabilidad de los parlamentarios que deben estar bien informados de lo que están legislando. “Es legítimo que (Cariola) esté en contra, pero yo creo que acá, al menos los elementos de información, estuvieron presentes en el debate”, juzgó.