"Lamento mucho de ser yo la persona que han perseguido. Son muchas las personas que han tenido sabático, pero hay una que lleva los apellidos Loncón Antileo y me han expuesto al escarnio público, ¿será por mi apellido? ¿Por qué a mí?", reflexionó la académica de la Universidad de Santiago.
La expresidenta de la Convención, Elisa Loncon, defendió su decisión de negarse al pedido de información sobre su información académica, en medio de la polémica por el año sabático con goce de remuneraciones que le autorizó la Universidad de Santiago (Usach).
Se trata de una controversia que se arrastra desde hace varios meses, luego que la bancada de diputados de Renovación Nacional oficiara al ahora exrector, Juan Manuel Zolezzi.
En ese contexto, el Polígrafo de “El Mercurio” utilizó la Ley de Transparencia para solicitar los datos académicos para justificar el beneficio de Loncón de un año sabático remunerado.
No obstante, la casa de estudios se negó a entregar la información, por lo que el Consejo para la Transparencia le ordenó presentar antecedentes como los nombres de cursos de pre y postgrado, las horas destinadas a su realización, detalles de papers y/o estudios publicados en el marco de la actividad docente o de investigación entre 2018 y 2022.
Pero, en un nuevo capítulo de la controversia, la Usach interpuso un reclamo de ilegalidad ante la Corte de Apelaciones, en contra del CPLT.
Loncón acusó discriminación por pedido de información académica
Al respecto, en una rueda de prensa donde fue acompañada por el secretario académico, Francisco Zambrano, la docente insistió en sus cuestionamientos apuntando a discriminación racial.
“La Universidad sigue siendo el espacio para cultivar el conocimiento y para generar la movilidad social”, sostuvo.
“Si yo no hubiera creído eso, si mis padres no me hubieran impulsado, yo sería una cuidadora de niños, tal vez estaría preparando los alimentos en la gran ciudad, en las grandes casas, pero logré esta formación de ser profesora, de ser investigadora, de ser académica y ahí estoy haciendo mi contribución”, se defendió.
“Toda mi documentación académica es una documentación validada por todas las universidades, incluyendo por la Contraloría General de la República”, agregó.
“No es cierto que oculte la información, mis paper, mis publicaciones, mi trabajo, mi trayectoria está en la página de la universidad, de Google Academic”, sostuvo Loncón.
“Lamento mucho de ser yo la persona que han perseguido. Son muchas las personas que han tenido sabático, pero hay una que lleva los apellidos Loncón Antileo y me han expuesto al escarnio público, ¿será por mi apellido? ¿Por qué a mí?”, reflexionó.
En ese sentido, detalló que durante su permiso sabático terminó de escribir tres libros. “Fui a diferentes universidades de mucho renombre en Europa, en América, Oceanía y dejé muy en alto el trabajo que hace la Universidad de Santiago de Chile”, enfatizó.
Loncón: “He sido objeto de desinformación”
Consultada por su negativa a entregar su información académica, Loncón insistió en asegurar que ha sido víctima de persecución y de fake news, desde que asumió como presidenta de la exConvención.
“Es de público conocimiento desde que asumí como presidenta de la Convención Constitucional, he sido objeto de desinformación respecto a mi trabajo y a mi persona, entonces, he perdido la confianza en la entrega abierta de esa información que por lo demás es pública y que está resguardada por un reglamento, por las leyes que tiene esta universidad pública”, dijo.
“No hay nada detrás de esta información, pero por cuidado de mis antecedentes personales, para evitar esta situación que se ha dado de desinformación y de mentira en torno a lo que yo hago, por esa razón me opuse”, justificó la académica de la Usach.
“Le cuesta a la sociedad entender de que una persona de tan bajo, de un pueblo tan oprimido, de tan pocas posibilidades, pueda tener dos doctorados”, fustigó.
En esa línea, Loncón descartó que haya contribuido al interés de su trayectoria académica el haber asumido como presidenta de la Convención, asumiendo un rol político.
“Todas las mujeres podemos tomar la palabra y hacer política, también las mujeres indígenas. Lo que no podemos admitir que por eso se nos persiga”, acotó.
Por último, puntualizó que sus críticas no son hacia el Consejo para la Transparencia, sino más bien con el vacío jurídico que se produciría en el proceso.
“Me siento con un vacío jurídico de falta de protección por un caso muy concreto de discriminación racial que a mí me afecta. Y eso abre también un espacio para las mujeres que hacen investigación dentro de la universidad, que pueden vivir lo mismo porque se pueden encontrar con él mismo vacío, hay que conversar esta ley y ver de qué manera no protegemos nosotros los académicos”, emplazó.
Consultada respecto al caso en que la Corte de Apelaciones ordene entregar su información académica, Loncón no descartó recurrir a otras instancias.
“Si yo considero que si mis derechos se vulneran, tengo derecho a avanzar en la Justicia. Hay una carta de académicos de todo el mundo que me están apoyando, porque es una lucha justa, pero tampoco me puedo anticipar”, concluyó.