Aunque esta es solo una propuesta, de tomar fuerza y llegar a instalarse y aceptarse atrasaría el calendario que hasta el momento piensa en un plebiscito de salida a diciembre de 2023. En el Socialismo Democrático comenzaron a mostrar apertura a un órgano más pequeño, con expertos, como quiere Chile Vamos. Eso molestó en Apruebo Dignidad, que comenzó a darle oxígeno a poner la decisión en manos de la ciudadanía si no hay acuerdo político.

Diferentes parlamentarios, particularmente de Apruebo Dignidad, han comenzado a poner sobre la mesa la idea de finalmente contar con un plebiscito de entrada en el marco del proceso constituyente, pero solo para definir el órgano que redacte la segunda propuesta.

Lo anterior tiene dos razones: la primera apunta al hecho que las conversaciones han avanzado, pero más lento de lo que se esperaba y cada bloque tiene y defiende sus líneas rojas o “bordes”, es decir, los elementos que no están dispuestos a transar.

Con eso todavía no hay señal de cuando, efectivamente, los partidos políticos puedan sentarse a firmar un acuerdo por una nueva Constitución.

La segunda razón tiene que ver con la composición del órgano: mientras en Chile Vamos hay apoyo por un grupo que no supere los 50 integrantes, en el oficialismo se habla de hasta 130.

En ese mismo contexto, el oficialismo está cuadrado con un órgano 100% electo, pero en Chile Vamos no molesta la idea de un órgano mixto, con participación de expertos.

Por esto último miembros del Socialismo Democrático han comenzando a mostrar cierta apertura, lo que Apruebo Dignidad no quiere.

Plebiscito de entrada y los tiempos electorales

La idea de tener un plebiscito de entrada para definir el órgano todavía es una tímida propuesta de parte de un sector acotado del mundo político.

De hecho, oficialmente, todavía ni siquiera se ha discutido la iniciativa como tal en la mesa de los partidos.

Eso sí, de volverse una realidad, el calendario electoral que se tenía en mente cambiaría y se extendería más allá de diciembre de 2023.

Aquello porque ahora Chile tendría que ir tres veces a las urnas: la primera por el plebiscito para definir el órgano, la segunda para elegir a los integrantes de este y la tercera para aprobar o rechazar la nueva propuesta constitucional.

Este jueves el presidente del Senado, Álvaro Elizalde (PS), afirmó que la idea de tener un plebiscito de entrada no se descarta, aunque sigue en pie la idea principal: llegar a un acuerdo en el mundo político con representación parlamentaria.

“Creo que ha habido acercamiento de posturas. Lo que veo es un diálogo de buena fe en que posturas se van acercando, no con la celeridad que nos gustaría”, sostuvo el senador.

Desde la oposición, el diputado Juan Antonio Coloma (UDI) afirmó que ve esta idea como una “medida dilatoria”.

“La ruptura al interior del Gobierno es evidente entre Apruebo Dignidad y el Socialismo Democrático”, lanzó.

“Creo que lo peor que le podemos decir a los chilenos es que por desacuerdo de ellos se va a avanzar en nuevas elecciones, porque no son capaces de ponerse de acuerdo”, criticó.

“Ojalá puedan hacer una propuesta que sea seria para tener una Convención o un nuevo proceso”, cerró.

Lo que sí no tiene apoyo en la mesa oficial, hasta este jueves al menos, es la idea del Partido de la Gente, que de frente quiere un plebiscito donde se pregunte a la ciudadanía si quiere o no un nuevo proceso constituyente.

Con todo, el lunes se retoman las conversaciones en la instancia, liderada por Elizalde y el presidente de la Cámara, Raúl Soto (PPD).