"Tengo discrepancias insalvables sobre varios contenidos de esta propuesta", señaló el expresidente Eduardo Frei, anunciando que votará Rechazo en el plebiscito constitucional. Diferencias con el sistema político, el Consejo de la Justicia y la plurinacionalidad marcaron su decisión. De esta forma, se convierte en el segundo exmandatario -tras Michelle Bachelet- en dar a conocer su intención de voto.
El expresidente Eduardo Frei anunció que votará Rechazo en el plebiscito del próximo 4 de septiembre, a dos días de que la Democracia Cristiana decidiera apoyar institucionalmente la opción Apruebo.
“Tengo discrepancias insalvables sobre varios contenidos de esta propuesta, los que considero comprometen la paz, el desarrollo y la prosperidad de nuestro país”, señaló.
Sin embargo, el exmandatario pidió “cumplir con los objetivos del Acuerdo por la Paz y la Nueva Constitución de noviembre de 2019, de contar con una Nueva Carta Fundamental”, agregó.
Rechazo: sistema político y Consejo de la Justicia
En primer lugar, Frei considera que el sistema político que establece el texto “no establece un adecuado equilibrio y división de poderes”.
“Crea una Cámara omnipotente y está expuesto a que una mayoría ocasional que controle la presidencia y la Cámara política, pueda avanzar hacia un régimen dictatorial de los que en el mundo están siendo frecuentes”, detalla.
En segundo término, sostuvo que “el texto arriesga que los jueces sean controlados políticamente a través del Consejo de la Justicia”.
“Juzgo inadecuada su composición fuertemente política y su enorme cúmulo de facultades, que van desde el nombramiento, pasando por la potestad disciplinaria, la gestión administrativa, la revisión de sus actuaciones, su traslado y remoción”, dijo el exgobernante.
En este punto hizo referencia al artículo 368 del texto elaborado por la Convención, que indica que los fiscales regionales serán designados a partir de una terna elaborada por las asambleas regionales.
Frei critica autonomías y plurinacionalidad
Por otra parte, el rostro de la DC expresó que la propuesta de nueva Carta Magna “frustra” la preocupación por la descentralización del país.
“Por una superposición de autonomías, de legislaciones de distinto origen, una plétora de asambleas y, además, comete el error de no haber puesto el acento en el fortalecimiento de los alcaldes y gobernadores”, explicó.
Finalmente, acusó una “una amenaza al Estado unitario y a la igualdad de derechos de los habitantes” por la forma en que está descrito en concepto de plurinacionalidad.
En ese contexto, aseveró que “el poder que se entrega a los pueblos originarios para vetar iniciativas administrativas o legislativas, constituye un privilegio que no tiene el resto de la ciudadanía”.
“Rechazo con un llamado a identificar aquellos aspectos de la propuesta de la Convención que deben ser parte de un acuerdo amplio sobre una reforma constitucional, que los incorpore en el menor plazo posible”, cerró.
Cabe recordar que Frei, junto a otros ocho expresidentes de la Democracia Cristiana, habían solicitado a la directiva del partido que diera libertad de acción a sus militantes. Sin embargo, una Junta Nacional determinó respaldar al Apruebo de cara al plebiscito.
Eduardo Frei y Michelle Bachelet ya definieron su voto
De esta forma, Eduardo Frei y Michelle Bachelet son los únicos exmandatarios que ya han expresado públicamente su opción respecto a la propuesta de nueva Constitución.
El 18 de mayo, la exjefa de Estado aseguró a Bloomberg que esperaba “que se apruebe el borrador” del texto. Esto, cuando la Convención todavía se encontraba vigente, por lo que no estaba el documento definitivo, que fue publicado el 4 de julio.
Si bien Ricardo Lagos se manifestó sobre el proceso a través de una carta, no precisó si votará Apruebo o Rechazo cuando le toque entrar a la cámara secreta.
A pesar de ello, aseguró que ninguna de las dos opciones representa un amplio consenso, por lo que se deben aplicar reformas a la Carta Fundamental independiente del resultado.
El único expresidente que no se ha manifestado es Sebastián Piñera, aunque los partidos de Chile Vamos, coalición que lo llevó a gobernar entre 2018 y 2022, ya entregaron su apoyo al Rechazo.