Todo comenzó por un video que se viralizó rápidamente este jueves en redes sociales, luego fueron audios y mensajes enviados por WhatsApp, que daban cuenta de la realización de fiestas clandestinas.
En el video difundido se observa a un grupo de 30 personas al interior de una cabaña bailando y bebiendo, donde el equipo de sonido da cuenta de que la reunión contaba con un grado de organización entre los asistentes.
Posterior a la difusión de este video, también se empezaron a compartir audios de WhatsApp donde personas, que aún no han sido identificadas, comentaban que asistentes a fiestas clandestinas en Cachagua -comuna de Zapallar- se habían contagiado de covid-19 o tenían síntomas, a la espera de hacerse un examen PCR.
En los mensajes se señala que estudiantes de colegios de la zona oriente de la región Metropolitana, como el Everest, el San Benito, el Huelén, Villa María o el Alianza Francesa.
Debido a la gravedad del delito sanitario, desde el Gobierno anunciaron que presentarían querellas criminales contra los dueños de las propiedades donde ocurrieron.
“Uno no deja de sorprenderse, cómo puede ser posible, no solo que los jóvenes en un sector en una playa quieren hacer una fiesta, como puede ser posible que los padres-dueños de casa permitan eso, que no haya un control más efectivo en los espacios que tienen que administrar”, afirmó esta tarde el ministro del Interior, Rodrigo Delgado.
“Es inaceptable de todo punto de vista, y como Gobierno y Ministerio del Interior nos estamos haciendo parte de la querella contra la persona que es dueña de esta propiedad”, agregó.
Un vecino de Zapallar llamó a Radio Bío Bío, denunciando que en varias cabañas o casas de veraneo se están realizando fiestas clandestinas y que “se ve muy poca fiscalización” en la comuna.
El hombre contó que sus padres trabajan en una de estas casas y tuvieron que realizarse exámenes PCR, luego de cuidarse durante todo el año.
Por su parte, el alcalde de Zapallar, Gustavo Alessandri, comentó que para realizar fiscalizaciones deben recibir una denuncia previa y que además estas fiestas suelen ocurrir en condominios privados, lo que dificulta la fiscalización.
“No vamos aceptar por irresponsabilidad e indolencia, jóvenes hagan fiestas clandestinas, hagan fiestas que no corresponden, en casas privadas (…) Vamos a darle la pelea completa o que vengan a contagiar a los vecinos de la comuna, pedimos a los padres de esos jóvenes, a los responsables de los jóvenes y a esos jóvenes, respeto, compromiso y entender que aquí está la vida de personas en juego”, comentó a Radio Bío Bío.
Tras la difusión del material audiovisual, el diputado de RN, Diego Schalper, comentó que presentó un proyecto, para que en el contexto de la pandemia, las personas que acudan a fiestas clandestinas también sean sancionadas.
He presentado proyecto para endurecer penas a los que concurren a fiestas clandestinas. Y le he pedido a @pdazan y al alcalde de Zapallar, Gustavo Alessandri que apliquen sanciones. Indolencia y frivolidad con los chilenos que sufren los efectos de esta pandemia tiene que parar. pic.twitter.com/i2d6oSxdBr
— Diego Schalper (@Diego_Schalper) January 7, 2021
Extractos de audios
Mientras se está a la espera de verificar los antecedentes, los audios virales dan luces sobre el origen y connotación de las fiestas.
“Una amiga del Everest me dijo que fueron al carrete de un huevón del San Benito, que habían como 70 personas y avisaron que la prima de un huevón tenía coronavirus. Y mucha gente se siente mal del Everest, y esta huevona está encerrada. La Rafa nos acaba de contar que sus amigos también se devolvieron y están encerrados en una casa, esperando que un huevón les haga el PCR (…) para que no se junten con nadie que venga de Cachagua”, dice una adolescente en el audio más difundido.
“Las del Huelén están todas con corona (…) si llegan a venir para acá no se junten con nada, en volada no se vengan, porque les juro que todo el mundo estuvo en esos carrete, y si no estuvieron en esos carretes”, cuenta una joven.
“Puta perro, qué paja lo que está pasando, pero no me arrepiento de ni una huevá, en los dos carretes lo pasé fino, fino. Me agarré tres minas, la verdad no tengo nada de qué arrepentirme”, afirma un joven.
“Toda la playa está con covid (…) Todo el mundo lo tiene, como te explico que todos mis cercanos, todas las del Villa María, las del Alianza (…) No vengas, no seas huevona”, dice una mujer.