A través de un banderazo en la Plaza de Armas de Santiago durante el fin de semana, una decena de personas de distintas nacionalidades se congregaron para visibilizar -según acusan- “un completo abandono” en el que se encuentran desde el inicio de la crisis sanitaria.
Desde la Coordinadora Nacional de Inmigrantes en Chile enfatizaron que la población extranjera residente no ha podido acceder a ninguna ayuda estatal, debido a las dificultades para regularizar sus visas.
El presidente de la organización, Héctor Pujols, indicó que 500 mil migrantes en Chile se encuentran sin documentos, a pesar de cumplir con los requisitos para obtener la visa definitiva. Planteó la necesidad de que aquello sea solucionado.
Asistentes a la convocatoria indicaron que en el Departamento de Extranjería y Migración les prometieron que, en un plazo máximo de un año, estaría regularizada su situación.
Sin embargo, acusaron que el periodo “no se cumple”, criticando además el Proyecto de Migración y Extranjería que actualmente se tramita en el Congreso.
En los últimos días la reforma a la Ley de Migraciones -que se tramita desde 2013- pasó a Comisión Mixta, luego que la Cámara Baja rechazara indicaciones aprobadas por el Senado.
En el Gobierno afirmaron que la iniciativa busca, principalmente, modernizar la legislación vigente, asegurar una migración ordenada, segura y regular, además de crear una institucionalidad migratoria adecuada.