El subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, afirmó que el país necesita una nueva institucionalidad para enfrentar el eventual aumento del flujo migratorio en 2021, pospandemia del coronavirus.
De acuerdo a las estimaciones del Fondo Monetario Internacional, Chile es el país latinoamericano con mayores proyecciones de crecimiento económico para 2021, una vez superada la pandemia del coronavirus.
Lo que propiciaría en una nueva ola migratoria similar a la de 2017 y 2018, es decir, cerca de 400 mil personas tratando de venir al año, según establece un documento reservado del Ministerio del Interior, elaborado por el Departamento de Extranjería y Migraciones, al que accedió El Mercurio.
Razón por la que el Ejecutivo puso en discusión inmediata el proyecto de migraciones, que busca que la llegada de extranjeros sea segura y regulada. Iniciativa que se tramitará este lunes 4 de mayo en la comisión de Derechos Humanos del Senado.
Por lo anterior, el subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, dijo que el país necesita una nueva institucionalidad para enfrentar este fenómeno global.
En tanto, el senador de Revolución Democrática y miembro de la comisión de Derechos Humanos, Juan Ignacio Latorre, manifestó que la iniciativa debe abordarse en perspectiva de los derechos fundamentales.
Distintas visiones
El director del Servicio Jesuita a Migrantes, José Tomás Vicuña, sostuvo que es un error mirar la migración desde un punto de vista meramente económico.
Por su parte, la directora del Programa de Estudios Sociales de la Universidad del Desarrollo, Báltica Cabieses, dijo que el flujo migratorio depende de factores dinámicos.
De aprobarse la nueva Ley de Migraciones, el Ejecutivo estimó el flujo migratorio entre 100 y 200 mil personas, asegurando que este escenario sería el “más conveniente para nacionales y extranjeros”.