A más de $18.500 millones ascendió la cifra que deben pagar las isapres, la mayor en la historia, a raíz de los casi 100 mil recursos de protección presentados por los usuarios durante este primer semestre.

99.690 fueron los recursos de protección presentados hasta la fecha, que según informó este jueves El Mercurio, significan un alza del 35,2% respecto a igual período en 2018.

Según el análisis de la consultora Altura Management, que cita el medio, para fin de este año se estima que los recursos presentados alcancen la cifra de 208.400, lo que cerraría el 2019 con un alza del 43,4% respecto a 2018.

Ajustar los precios de manera anual es una práctica constante por parte de las isapres y tiene como consecuencia que parte de sus asegurados presenten recursos de protección ante el desacuerdo que les genera el alza.

Estos recursos suelen ser aprobados por las cortes de Apelaciones y generan un gasto a la aseguradora que, en parte, utilizan de justificación para alzar el valor de su servicio al año siguiente.

“El problema de fondo ha sido que se estableció un sistema de reajuste que las aseguradoras aplican sin control de nadie”, sostuvo al matutino el abogado salubrista, Pedro Barría.

Posible regulación

La creación de un IPC de salud, según el ministro de la cartera Jaime Mañalich, resolvería estos conflictos anuales entre los sistemas de salud y los consumidores, al cuantificar los costos del sector y justificando con ello las alzas.

Ante la propuesta en tramitación que incluye este nuevo sistema de regulación, el ministro sostuvo que este ayudará a terminar con la judicialización en este tema dado que estima, hasta el momento, en US$ 10,5 millones los gastos por estas gestiones.

“Este precio lo pagan los asegurados que no judicializan porque el costo de los recursos se sube a la prima y se usa como cálculo para ajustar el plan base“, indicó Mañalich al medio impreso.