Primero fue el ministro Emilio Elgueta y ahora se sumó el ministro Marcelo Vásquez para intentar revertir en el Tribunal Constitucional (TC) las sanciones que dictó la Corte Suprema por los casos de corrupción en la Corte de Apelaciones de Rancagua.
Ambos jueces arriesgan la expulsión del Poder Judicial por faltas graves a la probidad.
Vásquez pidió al TC suspender la sanción, mientras que Elgueta presentó un requerimiento cuya admisibilidad será vista a las 16:00 horas de este miércoles en audiencia por la segunda sala del tribunal.
Ambos magistrados resultaron responsables de graves faltas a la probidad tras la investigación por tráfico de influencias y otros delitos, que se realizó en el tribunal de alzada de O’Higgins.
Por otro lado y tras conocer las medidas en su contra, el tercer ministro sancionado, Marcelo Albornoz, se suicidó en su hogar el pasado 3 de julio.
Al igual que para Elgueta, el abogado de Vásquez, Isidro Solis, pidió suspender el proceso de remoción, argumentando que la Corte Suprema carece de las atribuciones para dictar el auto acordado -conocido como acta 15- que regula este tipo de sanciones al interior del poder judicial.
En tanto, esta tarde será el propio juez Elgueta quien se defienda en el estrado, mientras que el otro interviniente será el Consejo de Defensa del Estado (CDE) (con la abogada Ruth Israel) que pedirá que se declaren inadmisibles las pretensiones del magistrado.