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Penas de hasta 3 años y 1 día de cárcel podrían arriesgar los profesionales de la salud que incurran en la “violencia obstétrica”, si se llega a aprobar un proyecto de ley que busca tipificar ese acto como un delito.
El documento fue presentado por el diputado Cristóbal Urriticoechea, de Renovación Nacional.
La iniciativa sanciona con presidio menor en su grado mínimo a medio el maltrato físico o de palabra durante el trabajo de parto o cuando la madre acaba de dar a luz.
Es decir, arriesgan penas que van desde los 61 días, hasta los 3 años y 1 día de cárcel.
En específico, el proyecto propone un cambio en el Código Penal, agregando un “nuevo artículo 394 BIS, que sancione a los profesionales del ámbito de la salud que, abusando de su oficio, hieran, golpeen o maltraten de obra o de palabra a una mujer embarazada”.
Lo anterior, siempre que “se encuentra en el proceso del parto, o que acaba de dar a luz y requiere de los oportunos cuidados médicos para su pronta recuperación”.
El diputado Urruticoechea, explicó que esto busca impedir que se manche un proceso que catalogó como “mágico”, por personas “sin escrúpulos”.
El proyecto fue patrocinado además por los diputados Sebastián Álvarez (Evópoli), Daniella Cicardini (PS), Gonzalo Fuenzalida (RN), Harry Jürgensen (RN), Diego Paulsen (RN), Leopoldo Pérez (RN), Diego Schalper (RN), Mario Venegas (DC) y Matías Walker (DC).
