El presidente Sebastián Piñera anunció este martes el envío al Congreso del proyecto de Modernización Tributaria que reforma la ley aprobada durante el gobierno de Michelle Bachelet, con el que busca premiar la inversión y bajar impuestos a las pequeñas y medianas empresas.
La ley tributaria aprobada en 2014 incluye un aumento de los gravámenes a las grandes empresas que sirvió para financiar el avance de la emblemática reforma de gratuidad en la educación.
“He firmado el proyecto de ley para modernizar nuestro sistema tributario” procurando que sea “más simple y único, más equitativo y plenamente integrado para todas las empresas chilenas”, dijo Piñera en un discurso en cadena nacional en horario central.
El mandatario destacó que el proyecto contempla “un régimen más favorable y especial para las pymes (pequeñas y medianas empresas) que tendrán menores tasas de impuestos”.
El gobierno estima que más de 150.000 empresas se beneficiarán si la reforma es aprobada.
Además se establecerán incentivos a la inversión acelerando los procesos de adjudicación de proyectos, en especial en la región de La Araucanía, donde se concentran los niveles más altos de pobreza.
En la misma línea, se mantendrán hasta 2035 los beneficios tributarios para las inversiones en “zonas extremas” del país.
En otro guiño a la clase media, el proyecto amplía las facilidades otorgadas para la compra de viviendas.
Con foco en las empresas, un tema álgido en la campaña electoral de Piñera rumbo a su segunda presidencia, el documento prevé que las compañías descuenten gastos de las donaciones a instituciones sin fines de lucro.
Además se buscará equiparar la carga tributaria entre las empresas convencionales y las que venden servicios o bienes de forma digital -como Netflix, Spotify y Uber- y retocar los impuestos verdes que tributan las empresas que trabajan con actividades contaminantes, lineamiento clave en una economía que tiene a la minería como uno de sus motores.
En tanto, se plantea “simplificar las normas de tributación internacional para atraer más inversiones”, señaló Piñera.
En su alocución, el presidente celebró la reactivación de la economía chilena con un crecimiento de 5,3% en el segundo trimestre, interanual, su mejor registro en seis años.
No obstante, alertó sobre la importancia de seguir avanzando. Con un Congreso dividido, sin mayoría oficialista, el mandatario apeló a la “buena fe” de los legisladores para tramitar la “urgente y necesaria modernización” del sistema tributario.