En la sede del Ministerio de Hacienda, el gobierno ofreció un aumento nominal a los sueldos de los empleados públicos de un 2,9 por ciento, una cifra muy distante del 7,5 por ciento nominal que ellos exigieron a través de un petitorio en la última cita que sostuvieron.
Un monto calificado como mezquino por parte de la presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) Bárbara Figueroa, quien aseguró que ni siquiera se acercaron a un piso decente para negociar.
Aún más duro en sus dichos, el líder de la Confusam, Esteban Maturana, dijo que están en pie de guerra, listos para luchar por algo que calificaron como justo.
En tanto, el líder de la asociación nacional de empleados fiscales, Raúl de la Puente, indicó que ante una oferta tan negativa por parte del Gobierno no vale la pena bajar el piso para llegar a un acuerdo. Además, recalcó que saldrán a las calles.
Los empleados fiscales buscarán presentar una contraoferta al Ejecutivo, la que se discutirán el miércoles en la mañana, estimándose además su presentación el próximo viernes en el Ministerio de Hacienda.