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Un soldado norcoreano que combatía junto a las fuerzas rusas contra Ucrania se inmoló al hacer estallar una granada para evitar ser capturado, según informaron las Fuerzas de Operaciones Especiales del Ejército ucraniano en Telegram. Este acto se produce luego de que la inteligencia surcoreana revelara que el régimen de Kim Jong-un habría instruido a sus militares desplegados en Rusia a quitarse la vida en caso de riesgo de captura. Tras un asalto fallido en el que murieron 17 soldados norcoreanos, el soldado se inmoló al ser encontrado por las fuerzas ucranianas, sin causar heridas a estas últimas. En medio de la escalada de violencia en la región de Kursk, se han reportado al menos 300 bajas norcoreanas, con Zelenski informando la captura de los primeros prisioneros de guerra de ese país.

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Uno de los soldados norcoreanos que luchan con las fuerzas rusas contra Ucrania se inmoló haciendo estallar una granada cuando iba a ser capturado, según informaron este lunes en su canal de Telegram las Fuerzas de Operaciones Especiales del Ejército ucraniano.

El aparente suicidio del soldado asiático se conoce poco después de que la inteligencia de Corea del Sur afirmara que el régimen de Kim Jong-un habría dado instrucciones a sus militares desplegados en Rusia para que se quiten la vida en caso de riesgo de ser capturados por el enemigo.

Según las fuerzas especiales ucranianas, el soldado norcoreano se inmoló después de participar en un asalto fallido en el que cayeron muertos bajo el fuego ucraniano otros 17 militares enviados a Rusia por Corea del Norte.

El soldado sobrevivió al asalto y fue encontrado por las fuerzas especiales ucranianas mientras limpiaban la zona de efectivos enemigos.

La intención del combatiente de Pionyang al hacer detonar la granada era matar también a quienes iban a apresarle, pero ningún soldado ucraniano resultó herido, señala la nota publicada en Telegram.

Primeros prisioneros de guerra norcoreanos

Según el servicio nacional de inteligencia surcoreano (NIS), 300 soldados norcoreanos han perdido la vida ya en la región rusa de Kursk, donde -según estimaciones de Kiev, Seúl y Washington- hay desplegados unos 11.000 militares norcoreanos para ayudar a las tropas rusas a expulsar a las unidades ucranianas que controlan parte del territorio de la región.

El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, cifró recientemente en cuatro mil el número de norcoreanos muertos y heridos en esos combates, mientras que Estados Unidos habla de un millar de bajas en el contingente del país asiático desde su despliegue en el frente de Kursk en noviembre.

Zelenski también informó este fin de semana de la captura de los dos primeros prisioneros de guerra norcoreanos.