Una banda de delincuentes chilenos que se dedicaba a robar en mansiones de lujo fue arrestada en el Reino Unido tras protagonizar una espectacular persecución.
Según detallan medios locales como Daily Mail, tres ciudadanos chilenos que entraron al Reino Unido con visas de turista se dedicaban a robar lujosas casas en el condado de Cheshire.
El citado portal agrega que el trío ingresaba, con pasamontañas, a diferentes mansiones de Wilmslow y Alderley Edge.
Tras ser sorprendidos, los chilenos se dieron a la fuga a bordo de un vehículo mientras la policía los perseguía por la autopista M40, carrera en la que los antisociales superaron los 180 km/h.
La huida por la concurrida carretera, que se extendió por casi 50 kilómetros, concluyó con los sujetos bajándose del automóvil y arrancando a pie. Tres de ellos fueron alcanzados por los efectivos policiales.
De esta manera, los chilenos, identificados como Héctor Paredes Muñoz (39), su hermano Víctor (31) y Sergio Sepúlveda Castro (27) fueron detenidos.
De acuerdo a la policía, los individuos entraron al Reino Unido a fines de 2022 después de haber recorrido otros países europeos, estableciéndose en el sur inglés con el “único objetivo” de robar en casas de alto valor por todo el país.
Ingresaron a varias viviendas
En marzo pasado, un residente de Broadwalk, Wilmslow, vio a dos de los chilenos usando pasamontañas en su patio mientras sonaba la alarma de su vecino.
Después de alertar a la policía, notó unos minutos más tarde que la ventana de su puerta trasera había sido forzada, descubriendo que le habían robado 60 libras esterlinas (61 mil pesos chilenos aproximadamente) de un bolso que mantenía en su cocina.
Un día después un residente de West Bank, cerca de Alderley Edge, denunció a un sujeto que sorprendió con el rostro cubierto en su casa, quien huyó al ser visto.
El Daily Mail también detalla el caso de Sabrina Worsley, una joven de 18 años que veía la televisión de su casa mientras su padre estaba de vacaciones. Al escuchar voces masculinas, descubrió la puerta abierta.
Pese a que los sujetos no robaron nada, fueron detectados por las cámaras de seguridad revisando la vivienda y escapando en un vehículo negro que estaba estacionado en las cercanías.
Un día después de este último incidente, el automóvil en el que se desplazaban los chilenos fue detectado en la autopista M40, en donde hicieron caso omiso de todas las instrucciones para que se detuvieran.
Tras ser alcanzados, cinco hombres escaparon a pie, siendo detenidos tres de ellos. Los dos restantes lograron escabullirse.
En el portamaletas del auto la policía encontró pasamontañas, herramientas, zapatillas y un sombrero que había sido robado el día anterior.
“Avergonzados y arrepentidos”
El abogado de los hermanos Paredes Muñoz, Edmund Potts, afirmó que sus representados se sentían “avergonzados y arrepentidos”, además de estar conscientes de la angustia generada a las víctimas.
“No era su intención pero por supuesto son totalmente responsables. Lo lamentan mucho”, mencionó el defensor.
Potts agregó que luego que Héctor ingresara como turista al Reino Unido, comenzó a buscar un trabajo aunque sin mucha suerte. “Desde Chile le avisaron que su madre se enfermó y que su pareja estaba embarazada. Se estaba quedando sin dinero”, sostuvo el abogado.
En tanto, aseveró que su hermano Víctor hizo trabajos de limpieza en diferentes lugares, “pero se le estaba haciendo difícil”.
En el caso de Castro, su abogada, Sarah Badrawy, indicó que entró al Reino Unido con la esperanza de encontrar un empleo para así trasladar a su joven familia. “Está casado y tiene una hija de casi tres años”, sostuvo.
“Se había estado hospedando en un hotel pero se cambió a un Airbnb en donde le robaron sus pertenencias. Se quedó con casi nada. En las dos semanas previas al delito, vivía en la calle”, indicó.
El juez Michael Leeming señaló que la huida por la carretera puso en riesgo la vida de automovilistas y la policía, agregando que los robos habían sido planificados ya que además de arrendar un automóvil, compraron herramientas y pasamontañas.
Después de admitir los cargos, los tres chilenos fueron sentenciados a tres años. Víctor, quien conducía el vehículo, recibió un año adicional.
“Todos eran miembros de una banda de crimen organizado que llegaron al Reino Unido con el único propósito de cometer delitos”, dijo Kieran Marsh de la policía de Cheshire.