Rusia planeaba abrir este martes corredores humanitarios para evacuar civiles de algunas ciudades asediadas de Ucrania, una oferta engañosa para Kiev que acusa a Moscú de imposibilitar la salida de la población.
Rusia propuso la apertura durante cinco horas de corredores humanitarios a partir de las 09.00 hora local de Ucrania y aseguró que “silenciará” su artillería, informó la agencia Interfax.
“Para llevar a cabo una operación humanitaria de manera efectiva: el 8 de marzo de 2022, la Federación Rusa declara un ‘régimen de silencio’ y está lista para proporcionar corredores humanitarios: desde Kiev y asentamientos adyacentes a la Federación Rusa”, indica el comunicado oficial.
La nota puntualizó que se hará “a través del territorio de la República de Bielorrusia. en la ciudad de Gomel con posterior entrega por vía aérea a la Federación Rusa, en dirección sur”.
Según la versión de las autoridades rusas, “también se proporcionarán corredores humanitarios. Desde Sumy a lo largo de dos rutas a Poltava y al territorio de la Federación Rusa a Belgorod, luego por transporte aéreo, ferroviario y por carretera a destinos seleccionados o puntos de alojamiento temporal, en dirección sur, de acuerdo con la parte ucraniana”.
El otro itinerario va “de Jarkov al territorio de la Federación Rusa a Belgorod, luego por transporte aéreo, ferroviario y por carretera. Esto, a destinos seleccionados o puntos de alojamiento temporal, a Lviv, Uzhgorod, Ivano-Frankivsk”.
“Que los civiles se vayan al territorio ruso es absurdo, cínico e inaceptable”, exclamó Iryna Vereshchuk, ministra para la Reintegración de los Territorios Temporalmente Ocupados.
Rechazo por corredores humanitarios en Rusia
En el terreno, la situación sigue agravándose tras doce días de guerra que han provocado cientos de víctimas y el éxodo en Europa más acelerado desde la Segunda Guerra Mundial.
Esto, además de una serie de duras sanciones contra Rusia por parte de los países occidentales.
Después de meses acumulando tropas alrededor de la antigua república soviética, Putin ordenó la invasión.
Lo anterior, alegando querer proteger la población rusoparlante de los territorios rebeldes del este de Ucrania.
El dirigente del Kremlin reclama la desmilitarización de Ucrania, un estatuto neutral para el país ahora inclinado hacia Occidente y garantías de que este nunca se adherirá a la OTAN.
El último balance de Naciones Unidas cifra en 406 el número de civiles fallecidos por la invasión. Pese a esto, se destaca que la cantidad de víctimas real es “considerablemente más alta”.
Al menos 13 personas murieron el lunes en un bombardeo contra una panadería industrial de Makariv, a unos 50 km al oeste de Kiev.
El ejército ucraniano alertó el martes de que Rusia aumenta el despliegue de tropas alrededor de las principales zonas de conflicto, que incluyen Kiev, Mariúpol y Járkov.
Sus fuerzas rechazaron un ataque ruso en la ciudad de Izium, en la región de Járkov, indicó. Además, aunque en inferioridad, sus tropas trataban de frenar el avance ruso por este y sur para rodear Kiev.