Los candidatos prodemocracia obtuvieron una victoria aplastante en las elecciones locales en Hong Kong, ante lo que la jefa del ejecutivo, Carrie Lam, prometió este lunes “escuchar humildemente” a los electores, que expresaron su apoyo al movimiento de protesta en la antigua colonia británica.
La magnitud del revés sufrido por los candidatos proPekín envió un mensaje inequívoco a las autoridades chinas, que, no obstante, aseguraron que siguen apoyando “resueltamente” a Lam.
“El gobierno central chino apoya resueltamente a la jefa del ejecutivo Carrie Lam en la región administrativa especial”, el nombre oficial de Hong Kong, declaró a la prensa el portavoz del ministerio chino de Relaciones Exteriores, Geng Shuang.
Lam no ha dicho lo que piensa hacer. Pero afirmó, en un comunicado, que “el gobierno escuchará humildemente las opiniones de los ciudadanos y reflexionará seriamente sobre ello”.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores chino, Wang Yi, hizo hincapié en que Hong Kong es parte de China independientemente del resultado electoral.
“Los votantes usaron la forma más pacífica para decirle al gobierno que no vamos a aceptar que Hong Kong se convierta en un estado policial y un régimen autoritario”, dijo Wu Chi-wai, presidente del Partido Demócrata, la mayor fuerza de la oposición.
“El gobierno debe enfrentarse con honestidad a la opinión pública”, añadió.
“Una revolución”
Tras conocerse los resultados de la elección, un foro de Internet muy utilizado por los manifestantes prodemocracia, convocó una marcha el domingo para presionar al gobierno para que acceda a sus reivindicaciones.
La movilización comenzó en junio contra un proyecto de ley que autorizaba la extradición a China continental de ciudadanos de Hong Kong. El texto fue abandonado en septiembre, pero aún así las reivindicaciones han aumentado.
Entre las cinco reivindicaciones del movimiento de protesta figuran la inclusión del sufragio universal en esta ciudad de 7,5 millones de habitantes y una investigación sobre lo que califican de violencia policial.
“Cualquiera que sea la fuerza de Carrie Lam, espero que pueda cumplir los deseos de la gente, responder a las cinco demandas (y) dar una oportunidad a los jóvenes”, dijo el activista Jimmy Sham a periodistas, tras ganar un escaño de concejal de distrito.
La elección de 452 concejales de distrito, que se ocupan de temas como la basura o los itinerarios de los buses, suele generar poco interés. Pero el domingo estos comicios tomaron un significado diferente debido al movimiento de protesta.
El resultado fue “nada menos que una revolución”, declaró a la AFP Willy Lam, analista político. “Es un profundo rechazo hacia la administración (de Hong Kong) y la política de Pekín respecto a Hong Kong”.
Según él, estos resultados podrían acelerar la salida de la jefa del Ejecutivo, pero también agravar la crisis. “Los manifestantes considerarán esta increíble victoria como un mandato otorgado por el pueblo, por lo que lucharán aún más duro, pero al mismo tiempo, no habrá concesión alguna de Pekín, por lo que la frustración aumentará”.
El lunes, los medios de comunicación públicos chinos, que habían pedido a los hongkoneses que votaran contra la violencia, restaron importancia a los resultados.
“El mundo está patas arriba”
Según resultados parciales, que abarcan poco más de la mitad de los 452 concejales de distrito, 388 candidatos prodemocracia han ganado un escaño, contra 59 favorables a Pekín y cinco independientes.
Esto representa un aumento excepcional de 263 escaños en el campo prodemocrático, en comparación con las elecciones anteriores de 2015.
La participación superó el 71% de los 4,13 millones de electores inscritos, una tasa récord muy superior al 47% de 2015.
El diputado proPekín Junius Ho, odiado por los militantes prodemocráticos, fue derrotado. “El mundo está patas arriba”, escribió en Facebook.
La elección de los concejales de distrito se rige por el sistema de votación que, en Hong Kong, se acerca más a la representación directa.
Esta elección no solo es simbólica, ya que seis escaños del Consejo Legislativo (LegCo, el parlamento de Hong Kong), que se renovará el próximo año, se disputarán entre candidatos de los consejos de distrito.
Y estos consejos enviarán a 117 de sus miembros al colegio electoral de 1.200 personas, controlado por Pekín, encargado de designar al jefe del Ejecutivo.