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El jefe de la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI) de Colombia, Carlos Ramón González, renunció a su cargo tras ser vinculado a un escándalo de corrupción en la UNGRD, salpicando a varios miembros del Gobierno y del Congreso. González, exguerrillero del M-19 y cercano a al presidente Gustavo Petro, habría ordenado sobornos a congresistas a cambio de apoyo legislativo.

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Este viernes el jefe de la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI) de Colombia, Carlos Ramón González, renunció a su cargo tras ser vinculado al escándalo de corrupción en la estatal Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), que salpica a varios miembros del Gobierno y del Congreso.

Se trata de una de las personas más cercanas al presidente colombiano, Gustavo Petro, con quien militó en la guerrilla del M-19 en su juventud.

La dimisión de González la confirmó el mismo mandatario a través de su cuenta de X desde París, donde asiste hoy a la inauguración de los Juegos Olímpicos (JJ.OO).

“Acepto la renuncia de Carlos Ramón, director de la Dirección de Inteligencia Nacional. Su cargo como responsable de inteligencia civil es incompatible con cualquier investigación judicial y con el mismo aparato de justicia del país”, manifestó Petro.

La acusación sobre corrupción contra jefe de Inteligencia de Colombia

A González, que también fue mano derecha de Petro como director del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República (Dapre), lo señaló la Fiscalía el jueves como la persona que el año pasado ordenó el pago de sobornos a dos importantes congresistas a cambio de apoyo legislativo al Gobierno.

Según reveló el pasado 3 de mayo el exsubdirector para el Manejo de Desastres de la UNGRD, Sneyder Pinilla, dinero de esa entidad se usó en 2023 para pagar millonarias coimas al entonces presidente del Senado, Iván Name; y al de la Cámara de Representantes, Andrés Calle.

Esos fondos supuestamente se desviaron del asignado para la compra de 40 camiones cisterna para abastecer de agua al departamento caribeño de La Guajira. Este resultó ser un proyecto en el que se malversaron los recursos, porque además los vehículos adquiridos no cumplían las condiciones técnicas, entre otras fallas.

Escándalo de corrupción que crece en Colombia

Carlos Ramón González es una figura muy influyente dentro del Gobierno, pero ya estaba mencionado en las denuncias.

Ayer lo citó oficialmente la Fiscalía en la audiencia de imputación de cargos contra Pinilla y contra el exdirector de la UNGRD Olmedo López. Sin embargo el ente persecutor aún no ha presentado cargos contra el jefe de Inteligencia de Colombia.

En esa audiencia, la fiscal delegada ante la Corte Suprema de Justicia, Andrea Muñoz, dijo que la exconsejera Presidencial para las Regiones Sandra Ortiz, también implicada en la trama de corrupción, recibía órdenes de González, como su jefe directo al ser director del Dapre, para supuestamente entregar las coimas a los congresistas Name y Calle.

“Para tranquilidad de fiscales y jueces, para su independencia y buen juicio y para la misma labor de defensa de los abogados de Carlos Ramón, lo mejor es la separación de su cargo”, agregó Petro en su mensaje en X.

El escándalo de corrupción en la UNGRD, organismo que se encarga de atender y prevenir emergencias causadas por desastres naturales en el país, lo destapó la prensa en febrero pasado. Desde entonces, la polémica ha ido creciendo hasta alcanzar a altos funcionarios del Gobierno.

Caso salpica a un ministro

Otro de los señalados en este proceso es el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla.

Según la Fiscalía, el secretario de Estado fue determinante, en coordinación con Olmedo López, para la adjudicación de tres contratos por 92.000 millones de pesos colombianos (unos 23 millones de dólares) para beneficiar a seis congresistas. Esto, a cambio de que apoyaran la ampliación del cupo de endeudamiento del Gobierno.

Pese a ello, Petro dio este viernes un voto de confianza a Bonilla sobre este caso, al señalar que sus actuaciones no han sido diferentes de las de otros ministros de Hacienda.