El movimiento de Las Damas de Blanco surgió en 2003, a raíz de una ola de represión del Gobierno cubano que se denominó "la primavera negra".

La líder del colectivo disidente cubano Las Damas de Blanco, Berta Soler, y su esposo, el disidente Ángel Moya, fueron detenidos este domingo, denunciaron en redes sociales miembros de esta agrupación.

Se trata del cuarto fin de semana consecutivo en el que se denuncian arrestos desde que el colectivo anunció que retomaba sus protestas dominicales para exigir la liberación de las personas detenidas por las protestas antigubernamentales del 11 de julio.

“Han sido arrestados la representante y líder de mujeres en Cuba Las Damas de Blanco, Berta Soler Fernández, y Ángel Juan Moya Acosta, expreso político y activista por los derechos humanos”, escribió en Facebook María Cristina Labrada Varona, miembro del consejo de dirección del colectivo.

https://www.facebook.com/mariacristina.labradavarona/posts/1977074759139949

Horas antes Moya había advertido sobre la presencia de agentes de la seguridad del Estado en torno a la sede de la organización, en La Habana, y subido fotos de un pequeño autobús y de varias personas, entre ellas algunas mujeres con traje militar.

https://www.facebook.com/angel.moyaacosta.1/posts/505231397616426

Según informaron en Facebook varias damas de blanco, en la ciudad de Matanzas (centro de Cuba) se detuvo a cinco mujeres de este colectivo cuando trataban de ir a misa y en Colón (centro) se multó a otras dos. Como es habitual, ni las autoridades cubanas ni los medios oficiales confirmaron los hechos.

Hace algo más de tres semanas Las Damas de Blanco anunciaron que retomarían sus protestas dominicales para pedir la liberación de los “presos políticos”, tras el parón que les obligó la pandemia. En los primeros dos fines de semana varias mujeres fueron detenidas en La Habana. El pasado 6 de febrero solo Soler y Moya fueron arrestados temporalmente.

El movimiento de Las Damas de Blanco surgió en 2003, a raíz de una ola de represión del Gobierno cubano que se denominó “la primavera negra”. Dos años más tarde, obtuvieron el premio Sájarov a la Libertad de Conciencia del Parlamento Europeo.