El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, atacó a la alta comisionado para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, asegurando que con sus críticas se entrometía en la soberanía brasileña y que Chile no es como Cuba “gracias a Pinochet”.
“Michelle Bachelet, comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, sigue la línea de (Emmanuel) Macron entrometiéndose en los asuntos internos y la soberanía brasileña, ataca a Brasil con la agenda de derechos humanos (bandidos), atacando a nuestra valiente policía civil y militar”, publicó en su cuenta de Facebook.
Bachelet denunció una “reducción del espacio democrático” en Brasil en los últimos meses, en referencia a las críticas de Bolsonaro contra organizaciones ambientalistas y de derechos humanos.
“También dice que Brasil pierde espacio democrático, pero olvida que su país no es como Cuba gracias a quienes tuvieron el coraje de detener a la izquierda en 1973, entre esos comunistas estaba su padre militar”, dijo en referencia a la dictadura militar de Augusto Pinochet.
“Señora Michelle Bachelet: Si no fuera por el personal de (Augusto) Pinochet, que derrotó a la izquierda en 1973, entre ellos a su padre, hoy Chile sería una Cuba”, recalcó posteriormente a las afueras del palacio Planalto, consignó Folha de Sao Paulo.
El padre de la Comisionada de la ONU, el general de la Fuerza Aérea Alberto Bachelet, fue detenido y torturado tras el golpe de Pinochet y murió en la cárcel al año siguiente.
“Cuando hay personas que no tienen nada que hacer, ocupan el sillón de los derechos humanos de la ONU”, remató el mandatario brasileño.
La expresidenta de Chile advirtió este miércoles sobre una “reducción del espacio democrático” en Brasil, en especial con ataques contra los defensores de la naturaleza y de los derechos humanos.
La exmandataria lamentó igualmente el “discurso público que legitima las ejecuciones sumarias” y la persistencia de cierta impunidad.
Denunció además la voluntad del gobierno brasileño de liberalizar la posesión de armas.
En lo que se refiere a los defensores de los derechos humanos, al menos ocho murieron en el país entre enero y junio, indicó, y precisó que la mayoría de estas muertes sucedieron en litigios por propiedad.