Alejada de los medios de comunicación desde hace años, la estela que dejó Tati Penna (61) en la televisión chilena se remonta a algunos de los hitos más importantes de la cultura popular de nuestros días.

Nacida como Constanza Bernardita Penna Brüggemann, su primera aparición a gran escala ocurrió en uno de los escenarios más influyentes del país: el Festival de Viña del Mar de 1982.

En esa instancia, Tati pisó la Quinta Vergara con el grupo Abril, con quienes representó a Chile en la competencia folclórica con la recordada canción “La semilla”.

Su pasado musical, sin embargo, no se remonta sólo a dicho hito: dos títulos aparecen en su discografía como solista: “Tati Penna” (1988) y “Tangos” (2002).

En ese contexto, fue invitada a participar de la Franja del No para el Plebiscito de 1988, donde prestó su voz para una de las canciones más insignes (y más “poperas”) de la campaña: “No lo quiero, no”, junto a Cecilia Echeñique, Isabel, Tita y Javiera Parra.

Ya iniciada la década del noventa (y con el retorno de la democracia en proceso), la artista inició una carrera televisiva donde destacó como una de las mujeres que se abrió camino en un medio notoriamente capitalizado por hombres.

El 9 de marzo de 1992, Penna ofició como una de las fundadoras del matinal “Buenos días a todos” de TVN junto a Felipe Camiroaga, con quien cultivó una pública amistad.

El fallecido conductor la invitó a casi todos sus proyectos en la pantalla chica, destacando siempre la influencia del trabajo de Penna en su estilo de animación. “Eran como madre e hijo”, recordó hoy Jorge Hevia en TVN.

A su vez, también participó de los programas de Chilevisión “Embrujada” (1992) y “Escrúpulos” (1993), este último con amplio éxito hasta fines de la década. En aquellos años, su nombre ya era sinónimo de punzantes entrevistas de largo aliento, y de temas que para la época eran catalogados de “tabú”, como la sexualidad y los enfoques de género.

Ya en el nuevo milenio, Tati fue parte de los programas “Con mucho cariño” en TVN, “La guerra de los sexos” en Chilevisión y “Sin Dios ni Late” en Zona Latina. Sus problemas de salud la fueron alejando de la TV paulatinamente.

Su última entrevista data de hace 5 meses en el marco de un podcast dedicado al aniversario por los 60 años de Chilevisión, canal del que fue una de sus grandes impulsoras. Allí, fu presentada como una de las “primeras feministas” de la televisión chilena.