Francisco Saavedra, conductor del programa de Canal 13 Lugares que hablan, ha tenido días para enorgullecerse. Las cifras lo dicen: los dos primeros capítulos de la nueva temporada del espacio lideraron en rating, dejando atrás a las producciones de las otras estaciones.

Pero más allá de los números verdes, hay otros aspectos que lo tienen contento. Uno de ellos es el rol social que ostenta, mismo que lo ha llevado a ganarse aún más el cariño de su audiencia.

No es extraño verlo involucrado en campañas de ayuda a desconocidos por distintos motivos. Una de las últimas ocurrió en febrero pasado, cuando se viralizó el video del presidente del directorio de Gasco, Matías Pérez Cruz, en el que expulsaba a tres mujeres del Lago Ranco acusando que la costa era de su propiedad.

Tras ver el video, Saavedra se decidió a regalar un viaje a Torres del Paine a las afectadas. “Basta de denostar, basta de creerse superior o con capacidades prohibitivas porque tienes tres ceros más en tu cuenta corriente”, escribió en la publicación de Twitter en la que anunciaba la ayuda.

En conversación con BioBioChile, el animador explicó que su carácter se formó en su hogar, con los más cercanos. “Vengo de una familia que ayuda mucho. Y que más que ayuda, se preocupa por el prójimo. No es como que ayuden y que den 5 lucas. Es gente que se preocupaba por los demás, y eso uno lo hereda”, dijo.

P: ¿Falta de ese rol social en la televisión?

“Siento que cada uno ve donde le aprieta el zapato. Yo tengo una responsabilidad, y al estar en un medio de comunicación tú puedes, de alguna manera, canalizar tus energías en las cosas que a ti te motivan en la vida”.

P: Sería fácil quedarse sentado, ¿no?

“Para mí el ayudar es innato, y cada uno tiene que saber cuál es el rol que cumple. Mis programas tienen mucho que ver con eso, con conectarme con la realidad de la gente. Y esto ni siquiera tiene que ver con plata, a veces tiene que ver con mover un dedo en el teléfono. Que te conteste el WhatsApp el gerente de una aerolínea, de un laboratorio. Es cosa de voluntad no más. Muchos podrían hacerlo”.


P: Hay veces en que algunos lo malentienden…

“Hay gente que dice que quiero ser político, y nada que ver. De hecho, soy un agradecido de la televisión, tengo un contrato por muchos años con Canal 13”.

“Por eso opino”

Para el comunicador, lo más importante es ser responsable con su rol. En Instagram, acumula más de 1,7 millones de seguidores, con lo que cada palabra que escribe tiene un gran alcance. En Twitter, la situación es similar, varias de sus publicaciones tienen cientos de retuits.

“Soy responsable con lo que hoy día estoy haciendo (…) por eso opino, a veces me he equivocado. Yo soy muy de sangre caliente”, reconoció Saavedra.

Y es que no han sido pocas las ocasiones en las que el animador se vio envuelto en situaciones incómodas. En diciembre del año pasado tildó de “imbécil” al ex candidato presidencial José Antonio Kast, luego que este ironizara con el mapudungún, la lengua mapuche.

En esa ocasión, reconoció que se equivocó aunque sólo en “la forma”. “Le podría haber dicho lo mismo de otra manera, porque por supuesto que me molestó su entrevista, muchas cosas”, aseguró.

Más tarde, en marzo de este año, trató de “cavernícola” a la columnista Teresa Marinovic tras una publicación en la que pidió que los padres de las feministas debían suspender los “beneficios” económicos, “por un mínimo de coherencia”.

Ese tuit, con los minutos, fue bajado de la red social, en lo que se entendió como una señal de arrepentimiento. Saavedra, en la ocasión, evitó referirse a la polémica que generó.

Los dos hechos anteriores son algunos de los que han llevado a que el conductor desconfíe de la red social. “Le he dejado de creer a Twitter”, aseguró. Y es que según comentó, siente que “es una red social de una élite de izquierda y derecha, muy extrema, donde la gente no tiene capacidad de dialogar, donde hay agresiones y ofensas. Eso me tiene muy aburrido”.

Aunque ahora ha ido aprendiendo. “Bajé un poco los decibeles, prefiero ayudar. Si de repente tengo alguna opinión que dar, la doy. Pero ya me voy a aprender a controlar en ese tipo de cosas”, aseveró.

Lo que le falta a Chile según Pancho

La Ley Nacional del Cáncer está en su primer trámite constitucional en el Senado, desde el 10 de diciembre del año pasado. Este es uno de los grandes temas que mueven al también conductor del espacio de Canal 13, Contra viento y marea.

“Tengo una tía que murió de cáncer, Violeta. Mi abuelo murió de cáncer. Lamentablemente, todavía no tenemos Ley de Cáncer y resulta que en un par de años será la principal causa de muerte del país. Es bien duro, y las cifras son duras”, aseguró Saavedra.

“El cáncer es transversal a todo, a la política, a las clases sociales. Es devastador”, añadió.

Su último episodio cercano al padecimiento fue en la televisión, cuando debió contar la historia de Andrés y Paulina en Contra viento y Marea. Él vivía con la enfermedad y aún así quiso contraer matrimonio, a pesar de que las proyecciones médicas quitaban toda esperanza. El hombre, meses después de la emisión del capítulo, falleció.

“Vi el sufrimiento de ellos. Entonces conocí ese mundo profundo. El de la salud pública, que es deleznable. Hay mucha gente que con lo que tiene, trata de hacer maravillas”, dijo.

“Por eso yo espero que el proyecto se tramite rápido, porque tiene que ser ley. Cada día que pasa, hay más personas que se mueren. Esa es la razón por la que uno se molesta a veces con la raza política, te molesta leer que se van de vacaciones, por ejemplo”, añadió.

Y hay algo que tiene completamente claro. “Creo que hay cosas que tienen urgencia, y esto, definitivamente, la tiene”, enfatizó.