Si hay un participante de la nueva temporada de Masterchef Chile que ha dado de qué hablar, ese es Maximiliano Alonso. El joven de 25 años ha despertado amor y odio entre los televidentes por su personalidad y por algunos comentarios polémicos.
Sin ir más lejos, hace algunas semanas se ganó varias críticas por decir que “las pantrucas” era una “sopa más de pueblo, para hacer engordar a la gente”. Sin embargo, el aspirante a chef no está preocupado por lo que la gente piense de él, al contrario.
Max, quien se considera un pastelero aficionado, estudió comunicación audiovisual pero luego trabajó como tripulante de cabina. Semanas antes de ingresar al programa, tuvo la oportunidad de irse a estudiar pastelería a Le Cordon Bleu en Australia; sin embargo, decidió postergar aquello para probarse a sí mismo en el espacio de Canal 13.
El aspirante a Chef dice que durante todo el programa, el cual se grabó en Colombia, tuvo una excelente relación con sus compañeros, por lo que le llamó mucho la atención que cuando se estrenó el espacio, el público tuviese cierto rechazo hacia él.
“Yo en general tengo buena relación con todos mis compañeros, nos llevamos muy bien con todos, y nunca escuché de alguien que le cayera mal mi personalidad, ahí. En ese sentido nunca tuve problemas con nadie. Entonces cuando el programa empezó me sorprendió mucho que a la gente le caí muy mal, desde el primer momento, siendo que por el formato del programa, como es tan cortito lo que nos ponen de uno como que no dejan que la gente nos conozca más allá”, reconoció a BioBioChile.
“Aparte me han puesto algunos comentarios desafortunados que la gente los ha malinterpretado y no me ha ayudado mucho, pero creo que con el tiempo, la gente va a ir conociendo mi humor y ojalá me gane el corazón de ellos”, dijo.
Por supuesto las redes sociales se han convertido en un lugar complicado para Max, donde los comentarios han sido muy duros, especialmente en Instagram. Tras la polémica por el tema de las pantrucas debió desactivar la opción de comentarios, pero ya lo está retomando nuevamente.
“Igual a mi no me entran balas, porque sé la persona que soy, entonces los comentarios haters como que no me influyen”, aseguró y afirmó que “no me arrepiento de haberlo dicho, pero me arrepiento de cómo lo dije”.
“Porque en el fondo lo que me estaba preguntando la periodista en ese momento, y pusieron un pedazo de lo que dije, era cómo conocí las pantrucas, y le dije que fue por una tía que era muy pobre cuando chica. Ella me contó que las pantrucas era un plato que su mamá le daba, que en el fondo era sólo el caldo con la masa, y como era barato, se lo daba para engordar para que no se desnutriera”.
“Es ahí donde yo digo que es un plato de bajo costo para engordar a la gente más humilde. Eso fue lo que quise explicar, pero se entendió de otra forma y de hecho, lo asumo y en redes sociales igual ofrecí disculpas a la gente que se haya sentido pasada a llevar. Ahora igual mucha gente no vio el programa y me andaba atacando, entonces el tema después se fue para cualquier otro lado”, añadió.
“Yo igual me caracterizo por ser una persona súper honesta. A diferencia de lo que dijo Alis en el Festival de Viña, yo lo pienso y lo digo. Por lo mismo no me arrepiento de lo que dije, porque yo soy así, sin tratar de pasar a llevar a la gente”, recalcó.
El aspirante a chef también comentó que no le preocupa que la molesten por ser ABC1 o que le digan cuico. “Hay gente que claro que por mi forma de hablar y de expresarme me asocian a un cuico, y bueno puede ser un estereotipo que me calza a mi, por mi personalidad”, dijo y comentó que debido al formato del programa el público no puede conocerlos realmente.
Hasta el momento Max sigue en el programa y poco a poco ha comenzado a ganarse el cariño de la gente.
View this post on Instagram¡Maxiliamo sabe el secreto de la cangreburger!🙊🔥
A post shared by MasterChef Chile (@masterchefchile) on